Cuba no tiene marcha atrás

LO siento -o mejor dicho, no lo siento nada en absoluto- por los hermanos Castro y su corte, porque lo de Cuba no tiene marcha atrás. Ya está bien. Más allá de nuestros complejos y nuestras vísceras, la vergonzosa muerte de Orlando Zapata supone un ... antes y un después. Y quien no quiera verlo desde cualquier Gobierno europeo se equivoca. Esto no hay quien lo pare. Porque el albañil Zapata no es un muerto cualquiera de los miles que han caído en Cuba. Es el primero de la nueva era y los Castro lo saben. Insisto: se equivoca quien no quiera verlo en el resto del mundo, de Europa y de España. En gran medida somos víctimas de nuestros complejos y Cuba es uno de éstos. Pero no podemos seguir amparándonos en supuestos discursos correctos para no asquearnos con un muerto de hambre. Literalmente. ¡Qué bochorno! ¡Qué dignidad la de su madre! ¡Cuánto abandono desde este lado del mundo! Ya está bien. Por Orlando Zapata y por otros tantos miles... lo de Cuba no debe tener marcha atrás.