Calatayud tiene medio vacía una residencia sanitaria mientras el hospital está saturado

Según ha podido saber ABC, estos últimos años se había iniciado un estudio para reconvertir el edificio y usarlo, cuando menos parte de él, como hospital para pacientes crónicos o que requieren cuidados frecuentes o paliativos. Así, el «Ernest Lluch» quedaría para los enfermos agudos.

Ese estudio quedó en nada. Entre tanto, cada vez son mayores y más frecuentes los problemas de saturación en el «Ernest Lluch». Lo dicen los profesionales que trabajan allí y lo constatan los pacientes, a pesar de que la Consejería de Salud del Gobierno aragonés se empeña en decir que son situaciones esporádicas. Y la dirección del centro opta por el silencio absoluto. Desde hace días, ABC espera entrevistar al director-gerente del hospital, Aurelio Artal, pero no se ha atendido la petición.

Estos días, mientras se ha hablado de «normalidad», las Urgencias tenían enfermos en habitaciones precariamente reconvertidas en zona de ingreso provisional. Los más afortunados, en cama; los menos, en sillones.

La consejera, en actos públicos

Mientras la consejera de Salud, Luisa Noeno, aparecía en actos públicos en Aragón, pero sin hablar de la situación del «Ernest Lluch». Y también esta última semana, el presidente aragonés, Marcelino Iglesias, ha visitado Calatayud para firmar un acuerdo empresarial y ha aprovechado para conocer el castillo junto al alcalde, el también socialista Víctor Ruiz, pero no acudieron al saturado hospital. Por su parte, el PP regional aún no ha anunciado iniciativa alguna en las Cortes ante este problema, aunque los populares bilbilitanos sí barajan una moción a nivel municipal o comarcal, como ya hicieron hace más de un año.