Feijóo, a la oposición: «Se les frustró la infamia con la verdad»

Tal y como ya subrayara en la rueda de prensa de la semana pasada, su relación con Dorado «finalizó cuando conozco por los medios de comunicación que mantenía casos abiertos con la Justicia», si bien en el momento cuando los presentaron no sabía de sus vínculos con el narcotráfico.

En todo caso, Feijóo se preguntó: «¿Fue un error tener aquella relación?». «Sí», no dudó en afirmar el presidente, al tiempo que dijo: «Hace dos décadas me equivoqué, no fui prudente», a pesar de que por aquel entonces no era titular de la Xunta, sino número dos en la Consellería de Sanidade. «Si algún gallego considera que debo disculparme por esto, también lo hago», puntualizó.

A pesar de dar detalles sobre esa etapa de su vida, aprovechó la ocasión para criticar a la oposición por utilizar estas fotos para «trasladar a la opinión pública difamaciones», dado que, y después de que el juez Vázquez Taín restase importancia a las imágenes, «se les frustró la infamia». «La verdad frusta la infamia», espetó Feijóo, recordando al mismo tiempo que en la etapa del bipartito se concedieron subvenciones a empresas de Marcial Dorado, a sabiendas de que por aquel entonces, éste ya «estaba condenado y en la cárcel».

Por el contrario, él mismo negó que hubiese firmado contratos con el narcotraficante: «En el ámbito de mis comentencias jamás firmé ni adjudiqué nada» a Marcial Dorado. La oposición se valió de hemeroteca -sacando noticias de principios de los años 90 en las que se vinculaba a Dorado con el mundo del narcotráfico- para verter dudas sobre las explicaciones de Feijóo.

El portavoz del BNG en O Hórreo, Francisco Jorquera, recordó la «Generación perdida» de Vilanova de Arousa, en referencia a aquellas personas que fallecieron víctimas de la droga, e hizo una especial mención a las familias que sufrieron y sufren este drama, presentes en la tribuna del Parlamento. «Pregúnteles a ellos si conocían a Marcial Dorado», instó el nacionalista a Feijóo, que tachó las explicaciones de éste de «increíbles» y volvió a solicitar su dimisión. «Váyase señor Feijóo porque no es digno de presidir este país», puntualizó.

Acto seguido tomó el turno de palabra el portavoz de AGE, Xosé Manuel Beiras, quien rozó el llanto en un momento de su comparecencia . «Me hace usted llorar de asco, rabia e indignación», en referencia a Feijóo, al tiempo que definió las aclaraciones del presidente autonómico como «un recital de desvergüenza, de soberbia».

A las peticiones de dimisión también se sumó el líder de los socialistas gallegos, «Pachi» Vázquez, que desmenuzó la relación de Feijóo con Dorado: «Fue duradera e intensa». «Usted dice que no conocía a Marcial Dorado pero seguramente lo conocía mejor que todos los gallegos porque estaba con él todo el día», esgrimió, a pesar de que el presidente de la Xunta ya había aclarado que por aquel entonces no conocía los negocios de Dorado y que esos viajes se limitaban a un tiempo de «ocio» .

El mismo argumento recuperó el portavoz parlamentario del PP, Pedro Puy, que les preguntó a la oposición: «¿Ustedes creen que se puede pedir responsabilidad política por una fotos de ocio de hace 20 años?». «Viven en la infamia fáctica», juzgó Puy, censurando que se utilicen unas imágenes para «hacerle daño a una persona, a un partido y a los pilares de la democracia», espetó.

La sesión, en la que hubo tiempo de recordar las fotografías de Anxo Quintana con un empresario y que se extendió durante más de dos horas, alcanzó momentos de agria bronca, en donde se escucharon descalificaciones hacia Feijóo y rumores de «fascista», «indecente» y «amoral». «Hoy no insinúan, hoy acusan», sentenció el de Os Peares, que criticó la manera de hacer oposición especialmente por parte de Vázquez. «Señorías, no merecen el acta de diputados», concluyó.