Más protección para los menores

El consejero de Sanidad y Asuntos Sociales, José Ignacio Echániz, fue el encargado ayer de informar de la nueva ley, que viene a suplir a una normativa que se ha quedado obsoleta, al tener más de 14 años y al haber tomado un protagonismo especial entre los menores las nuevas tecnologías, lo que hace conveniente una nueva regulación y más protección para los menores. Aseguró Echániz que el Anteproyecto de Ley de Protección Social y Jurídica a la Infancia y la Adolescencia de Castilla-La Mancha contempla a los niños y a los adolescentes «como ciudadanos con derechos y con deberes, tanto con su familia como con la sociedad».

Destacó el consejero que el anteproyecto de ley ha contado para su redacción con la participación de jueces y fiscales de menores, expertos universitarios y entidades de iniciativa social, «que han aportado su conocimiento y visión en una cuestión tan relevante como es la protección y el trabajo con menores».

Una ley que va a ser pionera, indicó Echániz, al contemplar como requisito para la adopción no tener antecedentes penales relacionados con la seguridad vial con menores (por ejemplo no llevar al niño en la sillita de coche obligatoria), así como la protección legal a otros sujetos de derechos, en concreto al nasciturus en los casos de adicción de la madre a sustancias nocivas.

También contempla el texto legislativo el derecho de los niños y adolescentes a tener relación con los abuelos, hermanos u otros parientes, siempre que sea beneficioso para sus intereses. Hace hincapié asimismo en la necesidad de que las Administraciones Públicas promuevan el derecho al juego, al ocio y al acceso a actividades culturales o deportivas , especialmente en los casos de niños o adolescentes con alguna discapacidad.

El consejero de Sanidad y Asuntos Sociales se refirió al carácter innovador de esta ley, que va más allá de las tradicionales instituciones de protección que ya regula el Código Civil, la «declaración de riesgo» y la «declaración de desamparo», de forma que se anticipa y recoge «un tercer perfil de protección para aquellos menores o adolescentes que presentan dificultades graves para la convivencia».

Según avanzó Echániz, «el texto regula la conducta inadaptada, sobre todo en los casos en los que esta inadaptación crea un grave riesgo para la convivencia de la familia, considerando así un fenómeno cada vez más frecuente, y que nos preocupa, como es el de la violencia de hijos a padres».

Aseguró que se trata de un texto que da respuestas adaptadas a los problemas del siglo XXI, como son los derivados del uso de las nuevas tecnologías. «Establece deberes de los menores en relación con el uso responsable de estos dispositivos y recursos, como un mecanismo de autoprotección, y con el fin de que aprendan a hacer buen uso conociendo sus consecuencias» . De esta forma, se prohíbe a los menoresde que los niños utilicen los móviles en el colegio.

También apuesta la ley por la mediación como herramienta para la resolución de conflictos entre personas, «una herramienta que será útil en los casos de adopción para aquellas personas que quieran buscar sus orígenes familiares», indicó Echániz.

Otra de las novedades es la distinción que se introduce a la hora de hablar de «menores» ; así, se dividirá entre «infancia», para los niños hasta los 13 años, y «adolescencia», desde los 14 hasta la mayoría de edad o emancipación legal. Esta distinción será útil para los procedimientos de declaración de desamparo o riesgo y para las tutelas administrativas.

Contempla asimismo la prioridad presupuestaria para las actividades de prevención, atención y reinserción de la infancia y adolescencia. Echániz avanzó la propuesta de creación de la figura del «acogimiento en hogar funcional», entendido como el núcleo de convivencia estable, similar al familiar, en el que su responsable o responsables residen de modo habitual.

El consejero de Sanidad también informó de otro acuerdo del Consejo de Gobierno de Castilla-La Mancha, la aprobación de un gasto de 3,4 millones de euros para la compra de 308.000 dosis de vacunas , que tienen como finalidad inmunizar a la población infantil de diversas enfermedades como el sarampión o la rubeola.

La compra, según Echániz, se ha realizado mediante el sistema de compra centralizada, lo que ha permitido un importante ahorro; además, Castilla-La Mancha empieza a poner en marcha el calendario vacunal único en España, que tiene como objetivo que los menores de todas las comunidades autónomas se vacunen contra las mismas enfermedades y en las mismas fechas. Este calendario vacunal único introduce algunos cambios en la región, como por ejemplo que la edad para la primera vacuna contra la rubeola o el sarampión se ha reducido de 15 meses a los 12 meses actuales.

También se ha autorizado un gasto de un millón de euros para la selección de los suministradores para la vacuna del meningococo C , que causa enfermedades infecciosas.