La comunicación del ERTE a los empleados de CCM será inminente

Aunque esta semana estaba previsto que la dirección de Liberbank comunicase a los trabajadores la situación en la que quedan tras el Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE), que incluye suspensión de contratos y reducción de los salarios, aún no han recibido ninguna comunicación por parte de la empresa, lo que está ocasionando gran incertidumbre entre la plantilla del Banco CCM en la región; y es que los trabajadores aún no conocen en qué situación laboral van a quedar. Sin embargo, según fuentes de la empresa, la comunicación será inminente.

El secretario general de la Sección Sindical de Comfia-CC.OO. Liberbank, Carlos Genillo , confirmaba ayer a ABC la gran preocupación que existe entre la plantilla porque aún no se conoce cómo se va a hacer efectivo el ERTE, es decir, quien estará afectado por una suspensión temporal del contrato y quien por una reducción del salario, que en el caso de los trabajadores de CCM es del 30%.

En Castilla-La Mancha hay unos 2.200 empleados de Liberbank-CCM, de los que más de 1.300 podrían sufrir la suspensión temporal de su contrato.

Ayer el rumor de que las comunicaciones de la dirección iban a llegar a lo largo de la mañana, de forma individual a cada empleado, eran constantes, pero al cierre del horario de oficinas no se habían producido.

Los pasados 27 y 28 de mayo los trabajadores convocaron dos días de huelga para tratar de frenar la propuestas de la empresa, al considerar que eran abusivas, especialmente la reducción de sueldos y los despidos temporales para la mitad de la plantilla.

Aunque los trabajadores han recibido en las últimas semanas el apoyo de los grupos políticos con representación en las Cortes Regionales, no ha servido de mucho y la empresa mantiene el ERTE.

Y es que para los sindicatos, las medidas impuestas por la empresa «son muy desproporcionadas y dispares» y no afectan por igual a toda la plantilla, ya que «algunos sectores se ven mucho más afectados que otros», manifestaba hace unos días Carlos Genillo. Sin olvidar el cierre de oficinas que se han ido produciendo en los últimos meses.

Muy significativo era la defensa que hacía Izquierda Unida, al considerar que los trabajadores no se merecen las medidas de reducción de salario y jornada que les están proponiendo, «no es justo que sean ellos los que paguen ahora aeropuertos en quiebra, teatros inacabados y proyectos faraónicos que otros promovieron».