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medio ambiente

Las cigüeñas vuelven por San Blas

Las provincias de Ciudad Real y Toledo acogen al 98% de las parejas nidificantes de cigüeña blanca en Castilla-La Mancha

Las cigüeñas vuelven por San Blas mariano cieza

P. H.

Como dice el refrán, por San Blas la cigüeña verás, y así es; numerosos ejemplares ya se pueden divisar en los nidos (en árboles, iglesias, torretas...) de muchos lugares de la región, aunque la migración hacia zonas más cálidas en invierno es cada vez menos frecuente porque son muchas las que permanecen durante todo el año en la Península, aprovechando la abundante comida que encuentran en los vertederos.

La población de Cigüeña Blanca en Castilla-La Mancha es de 2.315 parejas, según el último censo internacional que data de 2004 de Seo/BirdLife. Se distribuye principalmente por la parte más occidental y es más escasa en dirección este hasta desaparecer de amplias áreas de la parte oriental. Se centra básicamente en Ciudad Real y Toledo y estas dos provincias comprenden el 98% de las parejas nidificantes, mientras que el 2% restante se encuentra en Guadalajara.

Según ese censo, sólo existen dos colonias de más de 75 parejas (Almodóvar del Campo y Abenójar) y otras cinco con población superior a 50 parejas. Aún así la mayoría de la población se encuentra formando colonias (88,04%), mientras que una pequeña fracción de la misma está repartida en nidos aislados (11,9%). El sustrato de nidificación elegido mayoritariamente es el árbol, donde se ubica el 61,34% de las plataformas ocupadas; le siguen en orden de importancia las construcciones humanas con el 26,31% de nidos ocupados situados en las mismas, los tendidos eléctricos con el 7,08% y otros sustratos variados y diferentes a los anteriores con un 5,27%.

A pesar de contar con una población muy numerosa en la actualidad, la cigüeña blanca en Castilla-La Mancha no parece gozar de un estado de salud muy bueno, pues en comparación con otros censos anteriores, en 2004 los parámetros reproductivos eran más bajos. El cierre de alguno de los vertederos, que se habían convertido en un lugar de alimentación para las cigüeñas, puede tener una influencia negativa en la tendencia al alza del crecimiento de las poblaciones.

Las cigüeñas vuelven por San Blas

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