Se disparan los asesinatos y el tráfico de drogas en el primer trimestre del año

Los seis homicidios «dolosos» o asesinatos consumados suponen un incremento del 200% por lo que se refiere a los meses de enero, febrero y marzo de 2014, cuando «solo» ocurrieron dos. Llama la atención que la gran mayoría de casos, en concreto cinco de los seis, tuviera lugar en las islas de la provincia de Las Palmas, cuando un año antes se había contabilizado un único caso en la demarcación oriental. De estos cinco asesinatos, dos se cometieron en Gran Canaria, uno en su capital y el otro en el municipio de San Bartolomé de Tirajana; dos, en Lanzarote, ambos en Arrecife; y uno, en Fuerteventura. En el primer trimestre del año pasado, la única muerte con premeditación, alevosía o cualquier otra circunstancia agravante se había producido en Lanzarote. En cuanto al único suceso luctuoso de este tipo en la provincia de Santa Cruz de Tenerife, los datos de la Secretaría de Estado de Seguridad, que depende del Ministerio del Interior , exponen que este acaeció en la isla de Tenerife, si bien la estadística no aclara en qué municipio. En la demarcación occidental no aumenta, por tanto, el número de asesinatos , pues en los primeros tres meses de 2014 hubo también un solo caso, y también en Tenerife.

El otro delito cuya incidencia crece en el Archipiélago, a pesar de los esfuerzos de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado , es el tráfico de drogas. En el último período enero-marzo, Interior contabilizó en la región hasta 151 delitos de tráfico de sustancias estupefacientes, según la información que le suministraron la Guardia Civil, el Cuerpo Nacional de Policía y la Policía local. Más de un centenar y medio de casos que implican un incremento de prácticamente el 20% respecto de los 126 del primero de los trimestres del año pasado.

Como también los asesinatos, la mayor parte de los delitos de tráfico de drogas, exactamente 91 de los 151, se cometió en las islas orientales : 77 en Gran Canaria, cuando habían sido «solamente» 54 un año antes; seis en Lanzarote, aquí sí cinco menos; y ocho en Fuerteventura, los mismos que en los tres meses iniciales de 2014. En consecuencia, el aumento del 25% en la provincia de Las Palmas obedece en exclusiva a ese sensible crecimiento de esta actividad delictiva en Gran Canaria. En la otra provincia, la tinerfeña, el tráfico de estupefacientes también deja datos más preocupantes que en enero-marzo de 2014, aunque no tanto. Los 53 delitos de entonces fueron 60 en el comienzo de 2015, un 13% más. No hubo casos en El Hierro y apenas hubo dos en La Palma y uno en La Gomera, por lo tanto sin peso estadístico. El grueso de esta actividad delictiva en la demarcación de Santa Cruz de Tenerife se lleva así a cabo en la isla capitalina, en que los 48 delitos del primer trimestre del año anterior llegaron a 57, un 19% más, durante los mismos meses de 2015.

Las estadísticas del Ministerio que dirige Jorge Fernández Díaz permiten comprobar la evolución de la delincuencia, en general, en cada una de las siete principales islas de la región. En Gran Canaria, y al margen del mayor número de asesinatos y de delitos de tráfico de drogas, el conjunto de delitos y faltas disminuyó en los tres primeros meses del año, en términos interanuales, un 5%, hasta 9.387 casos. Casos que fueron 10.827 en Tenerife, un 6% más; 1.595 en Lanzarote, cerca de un 11,5% menos; 1.189 en Fuerteventura, un 2,4% menos; 469 en La Palma (-24,4%); 75 en La Gomera (-31%); y 37 en El Hierro (-12%). En otras palabras: Tenerife fue la única de las islas en que creció la delincuencia; tan es así, que, con las excepciones de los asesinatos y del robo de vehículos, se incrementaron los casos de todos los restantes delitos: robos con violencia, daños, hurtos...