El piloto británico Lewis Hamilton (McLaren-Mercedes), penalizado dos veces en el Gran Premio de Mónaco por conducta excesivamente agresiva, ha señalado que su situación con los comisarios está siendo una broma. [Así hemos contado la carrera]

Hamilton, sexto en las calles del Principado, fue penalizado con un paso por la calle de garajes por colisionar con Felipe Massa (Ferrari) cuando ambos pugnaban por la décima plaza; y con otro -traducido en veinte segundos añadidos a su tiempo al ser tras la carrera- por chocar con Pastor Maldonado (Williams).

"De las seis carreras que hemos disputado, los comisarios me han investigado en cinco. Esto es una broma ridícula", dijo el inglés. Al describir el episodio con Maldonado, Hamiton dijo: "Estaba entrando por el interior a Maldonado y se puede ver en la tele que él giro demasiado pronto para evitar que lo adelantara y me golpeó".

"Es simplemente ridículo. Estos pilotos son ridículamente ridículos. Es estúpido", dijo a la BBC. Nada más acabar la carrera Hamilton llegó a bromear con su situación con los comisarios y dijo: "A lo mejor es porque soy negro. Eso es lo que dice Ali G. No lo sé".

Culpa a Massa del primer golpe

Al referirse al incidente con Massa, el inglés señaló: "Yo era bastante más rápido que Massa. Intenté meterme por el interior (en la curva Loews) y él se cerró antes de tiempo. Intenté evitarle pasando por encima del bordillo, pero no pude evitar el impacto".

"Y, claro, me penalizaron, algo ya usual. Él (Massa) ya me perjudicó en la sesión de clasificación, pero fui yo el castigado", agregó. Hamilton justificó su estilo de pilotaje al señalar que los espectadores quieren verle correr, adelantar...