Hazte premium Hazte premium

El acusado de asesinar a un vecino y a un guardia civil en Santovenia se sienta desde este viernes en el banquillo

Imputado también por intentar matar a un tercero y secuestrar al novio de su hija durante las once horas que estuvo atrincherado, se enfrenta a 58 años de cárcel

Ruedas pinchadas y riña entre okupas: así se desató el sangriento día de furia en Santovenia

El dispositivo desplegado ante el atrincherado en Santovenia, que irá a juicio el 31 de mayo IVÁN TOMÉ
M. Gajate

M. Gajate

Valladolid

Esta funcionalidad es sólo para registrados

Una disputa entre vecinos en la noche del 30 de junio de 2022 desembocó en cuestión de horas en tragedia en la localidad vallisoletano de Santovenia de Pisuerga. Desde la mirilla de su su bajo, el 'Chiqui', uno de los implicados en esa trifulca, habría esperado supuestamente armado a que volviera a casa el residente del tercero con el que había discutido y cuando éste -Dionisio Alonso- estuvo frente a su puerta le habría disparado mortalmente. Lo intentaría a continuación con el hijo de la víctima pero el fusil se encasquilló. Atrincherado durante horas con un rehén, apretaría el gatillo una vez más, ante la presencia de Guardia Civil en el rellano, sesgando la vida del teniente coronel Pedro Alonso Casado. El supuesto autor de los dos crímenes se sienta desde este viernes en el banquillo de la Audiencia Provincial de Valladolid para un juicio con jurado y ante una petición de pena de 58 años por parte de la Fiscalía.

El Ministerio Público le atribuye tres delitos de asesinato, uno de ellos en grado de tentativa, uno de secuestro y otro más de tenencia ilícita de armas y además de la pena de prisión reclama indemnizaciones por valor de 700.000 euros para las familias de las víctimas, de acuerdo con las calificaciones previas del caso.

La Fiscalía sitúa el origen de los hechos en una disputa entre dos familias vecinas del bajo y el tercer piso del número 8 de la calle Alfredo Martín en torno a las once de la noche. Alertada la Guardia Civil acudió al lugar de los hechos y se encontró con Dionisio Alonso, de 45 años, quien aseguraba haber sido agredido y presentaba lesiones «visibles» para cuya curación fue trasladado junto a su hijo al Hospital Clínico de Valladolid, pero antes de ser atendidos se fueron voluntariamente y volvieron a casa.

Paralelamente, sobre la una y media de la madrugada, se alerta desde el bajo, en el que residía el acusado, de que temían represalias de sus vecinos cuando regresaran al inmueble, y la Guardia Civil, que se encontraba aún en las inmediaciones, observa como salen de esa casa la pareja y la hija del imputado.

Poco después se ve llegar, según escribe Fiscalía, a Dionisio junto a su hijo y «golpean la puerta del bajo» buscando a su morador, quien abrió la puerta con un fusil cargado y disparó a su vecino en el abdomen, cayendo éste de forma fulminante al suelo, para encañonar a continuación al hijo de la víctima, si bien, afortunadamente, él pudo huir ante los intentos del acusado de volver a cargar el arma, la misma que uso después para golpear repetidamente con la culata el cadáver que yacía en el rellano.

Negociación

Comenzó entonces un atrincheramiento que se alargó durante once horas por parte del imputado, quien se habría encerrado en el interior de su casa con el novio de una de sus hija a quien supuestamente ató de pies y manos y en algún momento apuntó con el arma bajo amenaza de matarle. Sus condiciones para dejarle salir: «Heroína, dinero o un coche».

A las cuatro y media se movilizó a la Unidad Especial de Intervención de la Guardia Civil que se desplegó en la zona y sobre las 6.45, el imputado «consciente de la presencia de agentes en la puerta de su domicilio» realizó supuestamente dos disparos, uno en el interior de la vivienda y otro a través de la puerta de entrada tras la que había oído el movimiento de agentes. Este segundo proyectil impacto en el casco del teniente coronel Pedro Alfonso Casado, de 50 años, que se encontraba al frente de la unidad que trataba de negociar con él. El sistema de protección no fue suficiente y el impacto de bala de le causó la muerte al agente.

Aún siguió encerrado el 'Chiqui' hasta las 12.30, hora en la que la Fiscalía sitúa su detención «solo tras realizarse una previa entrega controlada de metadona». El 2 de julio ingresaría en prisión provisional el acusado, que cuenta con numerosos antecedentes penales por hurto, resistencia a la autoridad, amenazas, daños y trafico de drogas.

La Fiscalía entiende que el imputado cuando disparó a Dionisio y a su hijo tenía el «ánimo de acabar» con sus vidas, al igual que cuando lo hizo contra la puerta de su vivienda tras la que era «consciente» de que se encontraban los agentes, sin que ninguno de los tres tuviera posibilidades de defenderse del sus «sorpresivos» actos. De esta forma considera los hechos constitutivos de tres delitos de asesinato. Por el de su vecino le pide veinte años de cárcel, que eleva a 24 en el caso del agente en concurso con un delito de atentado y reduce a ocho en el cometido en grado de tentativa. A ello suma cuatro años más por secuestro y dos tenencia ilícita de armas.

El juicio, que se iniciará con la formación del jurado, está previsto que se prolongue durante once sesiones y finalice el 14 de junio.

Esta funcionalidad es sólo para suscriptores

Suscribete
Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación