Siete fragmentos de las memorias de Aznar
El expresidente del Gobierno explica sus decisiones sobre Irak, Gibraltar o la ley de partidos y la ilegalización de Batasuna

El exjefe del Gobierno José María Aznar rememora en «El compromiso del poder» (Planeta) sus decisiones sobre Gibraltar, Chávez, Irak, la ley de partidos, la ilegalización de Batasuna y el 11-M. Éstos son algunos fragmentos destacados del libro:
Reproches al PSOE por Gibraltar
«De nuevo, es incomprensible que, en vez de continuar explorando las posibilidades abiertas con el avance sustancial en la vía de la cosoberanía, nuestros sucesores en el Gobierno retrocedieron hasta un punto insólito y gravemente perjudicial para la reivindicación española al aceptar un foro trilateral que incorporaba a Gibraltar como una parte más reconocida por España. Un grave error que sólo podía tener una interpretación: la debilidad y el abandono, claves de nuestra política exterior durante demasiado tiempo».
Chávez
«Por supuesto, es rotunda y absolutamente falso que España tuviera algo que ver en el intento de golpe de Estado en Venezuela. Yo mismo me encargué de decírselo personalmente a Chávez, cenando una noche en el restaurante La Rosa Náutica, de Lima, con motivo de la cumbre iberoamericana de la que el presidente peruano Alejandro Toledo era anfitrión. Hablamos claro. Muy claro. Le dije que estaba harto de sus acusaciones, e incluso fui un poco más lejos: «Mira, Hugo, si yo hubiera querido dar el golpe y lo hubiera organizado, te aseguro que tú ahora no estabas aquí ».
Ley de partidos
«Durante demasiado tiempo habíamos vivido instalados en una contradicción, la de luchar contra ETA y dejar intacto su soporte político en las propias instituciones democráticas. Esa contradicción se quería justificar en la imposibilidad jurídica de actuar contra la llamada «izquierda abertzale»: tenemos el convencimiento moral de que Batasuna es ETA —decían los más sesudos—, pero otra cosa es que podamos probarlo. Bueno, pues había llegado el momento de demostrar que esa resignación estaba fuera de lugar y que, con el marco jurídico adecuado, el apoyo de la opinión pública y la actuación de las instituciones del Estado, aquella situación podía y debía acabar»
Ilegalización de Batasuna
Tras el atentado contra una casa cuartel de la Guardia Civil en Santa Pola: «Esto se ha acabado Ángel, hay que pedir la ilegalización ya. (...) No estoy dispuesto a que por más tiempo la basura que son los dirigentes de Batasuna sigan paseándose libremente, impunemente, por las calles mientras los españoles tenemos que enterrar víctimas inocentes, niños incluidos»
«Hoy han vuelto a una legalidad refinando su engaño. No han condenado el terrorismo ni lo han rechazado. No han reconocido la injusticia del daño que han causado y que ellos justificaron y jalearon desde las instituciones (...) No debemos olvidar que los cómplices de ETA lo siguen siendo. Aquí no hay excusa para el olvido»
Irak
«La discrepancia en Europa respecto a Irak no estribaba en el grado de peligrosidad o de amenaza que representaba Sadam Hussein para la seguridad y la paz mundiales. En contra de lo que tanto se ha dicho y repetido, tampoco se centraba en la existencia de armas de destrucción masiva. Lo primero no lo dudaba nadie, y lo segundo, casi nadie, en tanto en cuanto el propio Sadam Hussein había contribuido a hacernos creer que las tenía y en gran cantidad.
El verdadero motivo de la discrepancia europea eran las pretensiones de Francia y Alemania. Ambos países llegaron a la conclusión de que era el momento de romper amarras con Estados Unidos e inaugurar una nueva concepción de la defensa de los países europeos, más alejada del atlántico y todo lo que ello significa. Una concepción—y esto es clave—en la que España y otros países europeos no tendríamos mucho que decir y en la que nuestros intereses quedarían supeditados a los de los grandes, al autoproclamado núcleo de la «Europa europea»
Sobre el 11-M
«Había encargado personalmente un informe a Jorge Dezcallar, director del CNI, con su análisis sobre el atentado y la cuestión de la autoría. El día 13 Dezcallar me lo hace llegar. Se trata de un informe personal, no clasificado. Después de una serie de consideraciones, como conclusión, el informe dice textualmente lo siguiente: « No estamos en condiciones de respaldar o rechazar ninguna de las dos grandes alternativas en presencia . Ni antes ni después del atentado se ha detectado absolutamente nada ni dentro ni fuera de España que pudiera indicar una preparación o satisfacción por lo que ha ocurrido. El silencio es total, como atestiguan todos los contactos mantenidos con los servicios de Inteligencia de nuestro entorno o el mundo árabe. Nadie ha detectado nada, ni antes ni después (y eso que la NSA de Estados Unidos lleva veinticuatro horas dedicada a este tema con la máxima prioridad)».
Zapatero y su discurso de investidura
«Diálogo, más diálogo, sólo diálogo, frente a mi prepotencia y autoritarismo. Abre todos los problemas sin cerrar ninguno: reforma constitucional, reforma de los Estatutos, retroceso antiterrorista. Actitud clara de intentar aislar al PP: el todos contra el PP. De economía no habla; matrimonio homosexual, igualdad, etc. Vuelco exterior. No se cita la retirada de las tropas de Irak.
A muchos gustará este discurso, que denota la ausencia de programa y de proyecto; aquí no importa lo que se piense, sino el talante. Ésta es la nueva majadería de lo progre correcto»
Noticias relacionadas
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete