Rajoy comienza a preparar «muy en serio» el debate con Pedro Sánchez

A punto de alcanzar el ecuador de la campaña electoral –hoy se cumple el séptimo día de los quince que la componen–, el debate ya ha entrado de lleno en la agenda del candidato y su equipo. El martes por la tarde mantuvieron un primer encuentro de trabajo sobre este asunto . El presidente no quiere avanzar si teme encontrarse con un Pedro Sánchez lanzándose a muerte para intentar recuperar el terreno perdido tras el fallido –para él– debate a cuatro del pasado lunes. Se limita a señalar que él se lo está preparando, aunque tiene mucha experiencia en este tipo de encuentros, porque «me los tomo muy en serio».

Desde su entorno, sin embargo, sí que indican que esa posibilidad, un Sánchez mucho más agresivo que hasta la fecha , es un escenario más que probable. Pero el presidente sigue en su línea de previsibilidad: hablará de lo que siempre habla, de economía, de empleo, de recuperación, de unidad de España y de lucha contra el terrorismo .

Será, por la parte de Rajoy, un debate «sensato, equilibrado y con referencias a lo que hay que hacer en el futuro» , lo que parece prever que haya algún anuncio electoral esa noche que desactive al líder socialista.

Lo que no hace el presidente –así lo aseguró ayer, en conversación informal con los periodistas que cubren la caravana popular– es ensayar las preguntas y las respuestas: «Ni ensayo ni discuto con nadie» , explicó, porque «a estas alturas, con cuatro años de Gobierno...», dijo, dando por sentado que conocía las respuestas a las cuestiones que se pudieran plantear .

Preparando el debate con Rajoy ha estado su vicesecretario de Organización, Fernando Martínez-Maíllo, además de otros responsables de Moncloa como su jefe de gabinete y ahora también jefe de campaña, Jorge Moragas. El presidente aprovecha los pocos ratos que le deja libre la campaña electoral –como el martes por la tarde, cuando regresaba de su gira de tres días por Andalucía– y sus responsabilidades de Gobierno. Es, recuerdan en su entorno, el único de los cabezas de lista que tiene que compaginar ser candidato con ser presidente del país .

En el PP saben que hay varios temas de los que se van a tratar en el debate en el que pueden mostrar su fortaleza : la economía –con la recuperación conseguida en los últimos años de la legislatura, tras unos primeros ejercicios agónicos–, las cifras de empleo o su experiencia en las tareas de Gobierno en el periodo más duro de la reciente historia de España.

En su contra tiene también algunos aspectos, debilidades en las que probablemente se centrará el oponente , Pedro Sánchez. Por ejemplo: el alto porcentaje de empleo precario que hay, y que afecta especialmente a los jóvenes; la falta de oportunidades para muchos de estos jóvenes que les ha llevado a tener que marcharse al extranjero a trabajar, o el siempre polémico asunto de la corrupción, que sigue siendo el gran lastre que arrastra el PP .

En todo caso, en el PP saben que este debate es muy importante , y se están esmerando a fondo en prepararlo, con un objetivo claro: vencer al PSOE.

No obstante, no son partidarios de intentar «machacarlo» , conscientes de que les resulta más útil un partido socialista que haga de muro de contención de las otras formaciones que compiten en estos comicios , desde la izquierda y el centro: Podemos y Ciudadanos.