Sevilla - Las Palmas: Lukebakio endulza al Sevilla de Ramos (1-0)

Con todo, tocó sufrir. La puesta en escena casi torna en drama. En un desajuste defensivo de los locales, el balón le cayó suelto en el área a Jonathan Viera y su disparo cruzado se fue lamiendo el poste izquierdo de Dmitrovic. Susto gordo para empezar, con el respetable aún tomando los asientos. El aviso de los amarillos, bien plantados desde ese inicio y abarcando todo el rectángulo, espabiló a los de Mendilibar, que supieron cómo reaccionar rápido para tomar la iniciativa y generar sus primeras llegadas. Rafa Mir fue el delantero elegido por el entrenador vasco, dejando en el banquillo al internacional marroquí En-Nesyri y al fichaje Mariano, que aguardaban su oportunidad. El murciano comenzó incisivo, con garra, acariciando el gol hasta en dos ocasiones muy claras en los diez primeros minutos del choque. Ambas las abortó un felino Álvaro Valles. El meta salido de la cantera del Betis voló primero para sacarle a Mir un tremendo derechazo a la escuadra y acto seguido impidió de nuevo el tanto del punta sevillista desviando con muchos reflejos un cabezazo picado que enfilaba las redes.

En ese momento parecía que el Sevilla imponía su guion. Sin embargo, la UD Las Palmas no se amedrentó ni dinamitó su orden. El cuadro de García Pimienta, con personalidad, dio guerra en la zona ancha y comprometió mucho la generación de juego de Rakitic y Óliver Torres, con Sow bastante desconectado también. Mendilibar decidió salir sin pivote puro y el efecto durante la primera mitad, desde luego, no fue el deseado. Gudelj, Fernando y otro de los nuevos, Soumaré, seguían el partido desde la bancada de suplentes. Las Palmas se bastaba en su eje con el trabajo del galo Loiodice, ganando duelos y facilitando a Kirian y Viera encarar relativamente cómodos por el centro. Mientras, los exsevillistas Sandro y Munir ensanchaban el campo e incomodaban lo suyo. El hispano-marroquí disfrutó de una de las mejores ocasiones de su equipo en el primer acto, con un zurdazo que se marchó por muy poco por encima del larguero.

El Sevilla andaba en un atasco significativo y no vislumbraba vías de escape. Ahí tomaron las riendas Suso y Lucas Ocampos para inyectar algo de brío ofensivo. Una combinación entre ambos acabó en gol del argentino, pero Martínez Munuera invalidó rápido el tanto por posición antirreglamentaria del pasador. Estaba en fuera de juego Suso. Poco más ofrecieron los nervionenses hasta el intermedio. Mendilibar tenía trabajo en vestuarios. Por ese camino, no iba a llevarse el partido nunca.

Pese al panorama, el vasco no movió piezas y salió con la misma formación a la segunda parte. Eso sí, Sow adelantó metros su posición y mejoró prestaciones. El suizo tuvo el 1-0 en sus botas pero el inconmensurable Valles también le ganó la partida en el mano a mano. Y otra vez cuando parecía que el Sevilla tocaba a rebato para acorralar a su rival, se rehízo la UD Las Palmas. Sergio Ramos se erigió en salvador en su estreno al evitar el gol de Kaba tras un primer rechace de Dmitrovic. Vital el cruce del camero. Los visitantes pidieron penalti por manos del ex del Real Madrid y luego reclamaron dos penas máximas más por derribo de Pedrosa sobre Kirian y del propio Ramos ante Kaba. Martínez Munuera y el VAR no apreciaron infracción sevillista en ninguna de las tres acciones.

Ahora sí, Mendilibar agitó la coctelera y consiguió decantar con sus cambios la balanza del partido. Metió en el campo a Lukebakio y En-Nesyri… y estos desatascaron la contienda. Tras sendos avisos con disparos lejanos de Ocampos y Pedrosa, el ariete marroquí estuvo a milímetros de marcar tras el despeje fallido de Valles. El portero de la UD Las Palmas logró corregir sobre la marcha y sacó el balón de la misma línea. Lo que no pudo evitar el bueno de Valles, pese a su partidazo, fue la derrota de su equipo. Pasados los 70 minutos, llegó a Nervión la felicidad, la jugada del partido. En-Nesyri cabeceó abajo, paró Valles y el rechace lo recogió Lukebakio para empalar a las redes el 1-0. El belga se estrenó con su nueva camiseta dándole la victoria al Sevilla FC. Una victoria de oro, la primera de los nervionenses en el campeonato. La primera del Sevilla de Ramos. Méritos también para Dmitrovic, que redondeó una buena actuación entre palos y en el descuento se dejó el mismo rostro para impedir el gol de Javi Muñoz.

Los de Mendilibar saborean su triunfo y miran ya de frente a una semana señalada en la que tocará ratificar el paso adelante dado y seguir cargando las alforjas de moral después del dubitativo inicio de campaña. El miércoles espera el debut en la Champions ante el Lens, de nuevo en el Sánchez-Pizjuán, y el sábado tocará visitar el siempre incómodo feudo de El Sadar para arrebatarle los puntos a Osasuna.