Valladolid - Sevilla
Un héroe inesperado
Un gol de Bono en el 94 rescató un punto para un Sevilla que había merecido más ante un Valladolid que se adelantó de penalti por medio de Orellana
Bono celebra el gol ante el Valladolid
Los partidos, como las películas, tienen un guión previamente establecido en el que los directores (en este caso los entrenadores) van adaptando a sus intereses una historia para que el resultado final sea acorde a lo que buscaba desde un inicio. Sin embargo, muchas veces ... en las historias aparecen héroes inesperados que dan un giro radical a una narración que parecía abocada a un objetivo inevitable. Ayer, en el José Zorrilla, ese héroe inesperado fue el que muy pocos esperan que se ponga la capa y el antifaz antes de los créditos finales. Ese fue Bono, portero disfrazado de delantero que surgió cuando el duelo agonizaba para meter en la red de su homólogo en el Valladolid un tanto que rescataba un punto para el Sevilla en un duelo en el que pudo hacer más méritos que su rival para ganar, pero en el que no gozó del acierto que sí tuvo un portero. El conjunto sevillista estaba en inferioridad en el marcador merced a un protagonista vestido de villano como Diego Carlos, que arrolló por detrás en colaboración con Rekik a Weissman para provocar un penalti que el VAR tuvo que advertir al colegiado el encuentro. Lo intentó con mayor o menor fortuna el Sevilla en la segunda mitad, atricheró al Valladolid, incluso remató al poste, pero fue Bono, héroe inesperado, el que acertó a rematar con su izquierda el tanto del empate en el último suspiro. Cosas de las películas, digo del fútbol.
Lopetegui apostó por un once con algunas novedades , como la aparición de Papu Gómez, que precisamente fue el autor del primer remate sevillista que puso en dificultades a Roberto. Fue un arranque positivo, en el que el argentino llevaba la voz cantante por su movilidad y la ayuda de Rekik doblándole. Era un dominio estéril eso sí, sin concretarse en disparos claros. En-Nesyri era un islote rodeado por agua. Poco a poco el Valladolid se fue rebelando y merodeando el área sevillista. Sergi Guardiola estuvo a punto de cazar un balón en el área. El equipo pucelano tenía menos calidad en los últimos metros. El partido era tedioso por momentos, pero la defensa sevillista se empeñó en ponerle picante al asunto. Weissman pugnaba en el área por un balón rebotado cuando Diego Carlos le arrollaba por la espalda en connivencia con Rekik, tirando al suelo al delantero pucelano. No señaló nada Estra Fernández, que sí rectificó cuando el VAR le invitó a revisar su decisión. Penalti que convirtió Orellana antes del descanso.
No debió gustarle esta última media hora antes del descanso de su equipo a Lopetegui, que introdujo a Acuña y Ocampos en el campo para sacar del mismo a Óliver Torres y Navas. Cambio de sistema , tres centrales sobre el césped y los dos recién incorporados como carrileros. Una pérdida de Ocampos derivó en una buena ocasión para Sergi Guardiola, al Sevilla le costaba superar la presión alta del Valladolid, estaba muy incómodo. Sin recuperar el balón iba a ser difícil encontrar el empate. Movía el banquillo de nuevo Lopetegui y volvía a un esquema de cuatro defensas, con Ocampos actuando de lateral ofensivo. Entraron De Jong y Rakitic y se marcharon Rekik y Gudelj. El croata dispuso de un remate tras una buena acción del Papu Gómez, pero su remate fue flojo y centrado a las manos de Roberto. El Valladolid empezó a recular y el Sevilla lo metió aún más en su área. De Jong avisaba en un remate al poste tras un centro de Ocampos al segundo palo. Último cambio, Jordán por Óscar. Más perfil ofensivo imposible. Tardó el equipo sevillista en darse cuenta de que, con dos delanteros buenos en el cabeceo, había que poner más centros al área. En el 87 llegó uno de Suso que estuvo cerca de ser el empate, pero el cabezazo de De Jong se marchó por poco.
El milagro llegó en el 94 . En-Nesyri, ante la indecisión de la defensa local, cazaba un balón que parecía que se iba y lo situaba en el punto de penalti donde Bono, que había subido a buscar la heróica en un corner, la recogía para, con un zurzado, hacer el 1-1. Héroe inesperado. Final de la película.
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