Inscripciones, amnistías y lesiones, los tres problemas del Sevilla en su estreno liguero

Y es que el Sevilla aún no ha inscrito a dos de sus últimas incorporaciones: Lucién Agoumé y Kelechi Iheanacho. Sí inscribió ayer a Álvaro Fernández, sustituto de Dmitrovic, al ser una ficha barata y sin amortización por traspaso, inscribirlo en LaLiga no ha sido un problema. No obstante, la necesidad de tener, al menos, al pivote francés para mañana es imperante. Con la sanción de Saúl y las lesiones de Sambi Lokonga y Suso Fernández, el técnico del Sevilla está muy corto de recursos para conformar un centro del campo competitivo. De ahí, que las exigencias de guión obliguen al club a meter a Agoumé en la lista. Por el momento, José Ángel Carmona y Juanlu han sido inscritos con ficha del filial.

Si todo se cumple con lo previsto, Agoumé será inscrito antes del partido en Las Palmas, pero es muy probable que Iheanacho tenga que esperar al partido siguiente. El Sevilla FC tiene que hacer algún movimiento de mercado para poder disponer de ambos, puesto que el límite salarial no permite ambas inscripciones. La dirección deportiva trabaja en la venta de Loïc Badé, al cual le han salido una gran cantidad de novias en Europa tras su participación en los Juegos Olímpicos. No obstante, las ofertas que llegan o no se acercan al precio impuesto por el Sevilla, o son destinos que no convencen al jugador.

Otras opciones que desbloquearía la inscripción de Iheanacho sería la venta de Gonzalo Montiel, que ya estuvo cedido la pasada campaña y afronta su último año de contrato, o la cesión de Joan Jordán, al que el club sigue presionando para que cambie de aires. Ambos jugadores cuentan con un salario muy alto y sus salidas aliviarían la situación del club hispalense, que ha tenido que reducir su gasto de forma drástica este verano para adecuarse a las normas de LaLiga.

Mientras se resuelven estos casos, García Pimienta se muestra ilusionado con su estreno y anunció ayer que pensaba viajar con toda la plantilla, ya estuviera o no inscrita. No obstante, no sólo son las incripciones el motivo de preocupación para el técnico. El Sevilla FC solicitó la amnistía para Saúl Ñíguez, sancionado la temporada pasada cuando militada en el Atlético de Madrid. Este tipo de solicitudes son habituales en años en el que la selección española gana algún título, como ha sido el caso de este verano con la Eurocopa. Sin embargo, sólo hay un jugador sancionado para esta primera jornada de la competición liguera, por lo que la petición sevillista carece de fuerza y la Real Federación de Fútbol sigue sin responder. Tanto Víctor Orta como el técnico catalán se han mostrado en los últimos días poco optimistas al respecto, y parece que ya es hora de aceptar que Saúl no jugará ante Las Palmas.

Un contratiempo para García Pimienta, quien ha depositado en el ilicitano toda su confianza para liderar su nuevo proyecto. El ex del Atlético de Madrid ha venido a Sevilla para renacer como futbolista y para exhibir galones, un rol que escasea dentro de la renovada plantilla hispalense. No obstante, el problema ante los canarios no será tanto de liderazgo como de efectivos. La lesión de Lokonga pospone los planes de poder ver a la renovada medular confeccionada por la dirección deportiva. Una baja que, junto a la de Saúl, podía combatirse teniendo a Suso en la recámara. La mala suerte quiso que el gaditano recibiera un golpe el pasado lunes y se haya lesionado para varias semanas. De hecho, al mediapunta no se le espera hasta después del parón de selecciones de septiembre.

Por tanto, contando con Agoumé, el Sevilla sólo tiene disponible a Sow. Falta un tercero en discordia, puesto que Jordán está apartado por el club para forzar su marcha. De esta forma, García Pimienta se verá obligado a adelantar a Gudelj al centro del campo, aunque su rol es el mismo que el de Agoumé y ninguno de los dos están acostumbrados a ejercer de interior.

También está la opción de confiar al algún canterano de los que ha hecho pretemporada con el primer equipo. Collado y Rivera estuvieron en el duelo de Anfield ante el Liverpool y podrían ser un parche a unas malas. De hecho, esta posibilidad la ha dejado el propio técnico sobre la mesa en rueda de prensa: «Son chicos que han estado en toda la pretemporada y lo han hecho bien. Van a venir convocados, igualmente hay soluciones en la plantilla. Con Saúl, esperemos que la amnistía llegue aunque no somos optimistas. Están preparados, incluso los canteranos, para afrontar el primer partido de liga».

También hay una tercera vía, que consistiría en modificar el sistema del entrenador y pasar de un 4-3-3 a un 4-2-3-1. Peque podría usarse como comodín para un posible mediapunta acompañado de un doble pivote defensivo (Agoumé - Gudelj). No obstante, no es el sistema deseado por el entrenador, que ha preferido usar en la medular a un pivote posicional con dos interiores con recorrido (Sow - Saúl).

En definitiva, el catalán tendrá que tirar de ingenio o de confianza para confeccionar su primer once oficial de la temporada 2024-25. Los problemas enumerados no parecen desalentarlo, puesto que sus declaraciones previas al partido han estado marcadas por la ilusión y la confianza en sus hombres. Mirando a los objetivos, se muestra ambicioso: «Somos el Sevilla y aspiramos a todo. Tenemos la suerte y la mala suerte de tener semanas limpias y eso nos va a permitir pelear por todo».

El técnico, además, ha aclarado que espera ya poco del mercado de fichajes y que la plantilla que hay es muy parecida a la que quedará en la foto el 31 de agosto: «Han sucedido muchos movimientos. No sé si la plantilla está cerrada pero va a estar muy cerca de lo que será el 31 de agosto». De esta forma, Pimienta cierra el debate sobre la posibilidad de que llegue un centrocampista más, como Sergi Roberto. O que se refuerce la defensa, algo que sólo ocurrirá si la venta de Badé se llega a efectuar.