El adiós a Petros, primer síntoma del cambio
El brasileño se ganó al personal recuperando balones, pero con el tiempo perdió adeptos al comprobarse que su contribución no pasaba de ahí
El «dejen salir antes de entrar» que figuraba antaño en las puertas de algunos medios de transporte, aparece esta temporada en el frontispicio de la del Real Betis, obligado a hacer caja y a desembarazarse de lo que no necesita antes ... de afrontar la contratación de nuevos jugadores. Logrado el objetivo, lo mismo habría que sustituir el cartel por otro clásico, «prohibido el cante», pues ha sido mucho y desafinado el de las últimas direcciones deportivas en la confección de las plantillas. Que los tiempos han cambiado con Lorenzo Serra Ferrer y Quique Setién, lo prueba el que la primera salida sea la del brasileño Petros , convertido en jugador franquicia por Gustavo Poyet, renovado por el Consejo y condenado al ostracismo con Víctor, tras contar con su confianza.En esta Sevilla donde tanto gusta la tostá, el caño, la rosca, la ruleta, la bicicleta, el elástico, el sombrero, el aguanís y toda la variedad de virguerías futbolísticas, el jugador corajudo que se parte la cara y de paso se la parte al contrario siempre ha tenido alta estima.
Somos nuestras contradicciones. Petros se ganó al personal corriendo tras el balón y recuperándolo, pero con el tiempo perdió adeptos al comprobarse que su contribución no pasaba de ahí . Ni tenía disciplina táctica, ni capacidad para gestionar el balón en ataque, ni su carácter ayudaba al equipo al ponerlo bajo la diana arbitral con su gusto por la pendencia y por el teatro. Su virtual marcha al Sao Paulo es la constatación de que Setién quiere cambiarle por completo la fisonomía al centro del campo verdiblanco.Decía hace unos días Rafael Salas, aún candidato a la presidencia, que de no realizarse traspasos el club sólo tendría ocho millones de euros para reforzarse. El pago del Sao Paulo por Petros elevará el fondo algo más de un veinticinco por ciento. Una cantidad aún modesta si no hay más salidas, pero que podría servir para encontrar jugadores del perfil que requiere el fútbol combinativo del nuevo entrenador, tan aborrecido por el numeroso gremio de estajanovistas que pueblan los banquillos del fútbol español. Ojalá se acierte, por el bien del Real Betis y del fútbol.
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