La CUP dice que ni la prorroga de los presupuestos ni la imputación de Mas facilitarán su investidura

Gabriel ha advertido en una tertulia de Catalunya Ràdio recogida por Europa Press de que la CUP ya esperaba la presión desde todos los frentes y, especialmente, durante las declaraciones de la exvicepresidenta Joana Ortega, la consellera de Enseñanza, Irene Rigau y Mas, cuya fecha, ha sospechado, « no es casual ».

«Ya sabíamos que cuando se produjera habría esta reacción popular de acompañamiento —a los encausados—, pero no nos moverá de nuestro posicionamiento », que ha recordado que va más allá de las personas.

Gabriel tampoco se ha sorprendido de que se diga que la CUP está generando un bloqueo al no investir a Mas que puede provocar una prorroga de los presupuestos de 2016: «Será una nueva etapa de presión a la CUP usar la prórroga de presupuestos como arma arrojadiza».

La diputada electa ha aclarado que su formación no quiere que se prorroguen y ha asegurado que «más tarde o más temprano se verá la generosidad de la CUP en la negociación».

También ha cargado contra la «aritmética trampa» de quienes critican que una fuerza de 336.000 votos que no quiere a Mas —la CUP— no puede determinar a otra con 1.620.000 votos —JxSÍ—, en primer lugar porque cree que es demasiado arriesgado decir que todos los representantes de la lista de JxSí quieren a Mas como presidente y porque al margen de diputados de la CUP hay muchos más diputados en el hemiciclo que no le quieren como presidente de los que sí lo quieren.

Ha relatado que las negociaciones continúan en su fase premilinar, y que están trabajando para alcanzar un acuerdo.

«Estamos en una fase muy inicial del proceso , muy exploratoria. Nos estamos conociendo», ha dicho, y ha recordado su visión de la legislatura que no requiere sólo decidir cómo se disponen los asientos o la mesa del Parlament, ni si se aprueban cuatro leyes.

Ha recordado que hay cuatro equipos de trabajo: el del plan de choque, el de ruptura con el Estado, el de proceso constituyente y del marco general en el que se trabajará, que «no puede ser un marco autonómico».

Sobre la mesa la CUP no está poniendo su programa —salir del euro y de la UE—, sino propuestas que pueden ser asumidas por su interlocutor, y ha aventurado que en caso de alcanzar el qué, el cómo y el cuándo, el quién se adecuará por sí sólo a las anteriores.