El punto de la navidad

Quien no haya recibido unos calcetines horribles en Nochebuena que tire la primera piedra. La Navidad no solo es la época del año perfecta para cantar villancicos y beber un dulce ponche caliente, también es una buena excusa para cometer los más divertidos crímenes contra la moda. Y si el buen gusto es la víctima, su verdugo son los suéters en tejido de punto con motivos navideños ridículos. Seguramente recuerden la mala impresión que causa Mark Darcy (Colin Firth) en «El diario de Bridget Jones», luciendo un esperpéntico jersey de lana color verde inglés con el rostro del reno Rodolfo. Pues, esa es precisamente la estética que debemos buscar este invierno.

Jack Spade lo ha hecho a lo grande. La firma nicho estadounidense ha preparado una colección de ensueño para los «freakies» de la Navidad: guantes y gorros de lana con forma de dinosaurios o de Monstruo de las Galletas , jerseys con estampados alpinos y mucha inspiración en el glamour de los centros de esquí suizos de la década de 1960. Los amantes del estilo «preppy» pueden optar por la colección cápsula del americanísimo Tommy Hilfiger , quien recurre al clásico estampado invernal «Fair Isle» –popularizado por el Príncipe de Gales en 1921– para su línea de jerseys y cárdigans de punto de lana para hombre. Además, estampados de cuadros exclusivamente diseñados para esta colección e inspirados en el tartán escocés que podremos encontrar en camisas, pijamas, bufandas y como parte de detalles insospechados en el reverso del bajo de pantalones chinos o en los puños de un blazer clásico.

Por su parte, los más audaces seguramente se enamorarán de los jerseys de Givenchy en lana de angora y aplicaciones de seda que simulan las coronas y guirnaldas navideñas . Y para los «locales» y fieles al «made in Spain», nada como los suéters que acaba de presentar Miranda Makaroff para Lydia Delgado . Entre sus diseños destacan un jersey de cuello alto de lana virgen con dibujo de herradura y cuernos de alce y un mini pulóver color rosa palo con la inscripción «Le Caniche» –y la silueta del perro afrancesado– que prometen ser la delicia del 24 de diciembre. Un capricho al borde de la ridiculez. Pero, ¡es Navidad!