Madrid 2020, Xavier Trias: El sueño de Madrid, más cerca

El potencial económico y de transformación urbana que representan unos Juegos para una ciudad es, sin duda, una oportunidad que Madrid no puede dejar escapar. El legado que dejan sobrepasa sus límites físicos y se adentra en el terreno de los intangibles. Organizar unos Juegos es un proyecto común, de ilusión colectiva, que requiere de la suma de esfuerzos y de voluntades.

Siempre me gusta insistir en el increíble poder que tuvieron los Juegos Olímpicos de 1992 para proyectar la ciudad de Barcelona en todo el mundo. Un proyecto que nos mostró el camino del progreso como ciudad abierta, solidaria, innovadora e internacional que somos. Un activo que tenemos que seguir cuidando y promoviendo entre todos.

El Estadio Olímpico «Lluís Companys» será el punto neurálgico de la subsede de Barcelona, donde podremos ver algunos de los partidos de la fase preliminar de fútbol. El Estadio Olímpico fue el epicentro de la celebración olímpica de Barcelona 92 y desde entonces no ha dejado de acoger competiciones deportivas del más alto nivel.

Desde estas líneas, quiero expresar mi deseo de que Madrid sea la sede de los Juegos Olímpicos de 2020, unos Juegos que durante unas semanas la convertirán en la capital mundial del deporte. En Barcelona estamos listos para ser una de sus principales subsedes y ponemos al servicio de Madrid nuestra experiencia olímpica.