Los trabajadores de Opel en Figueruelas aceptan bajarse el sueldo para blindar el empleo

Este lunes, los trabajadores de GM en Figueruelas estaban llamados a votar el nuevo convenio que incorpora rebajas salariales y que, a falta de su ratificción por parte de la plantilla, habían acordado en la madrugada del sábado la dirección de la empresa y los sindictaos UGT, CCOO y Acumagme. Estaban llamados a las urnas 6.850 empleados. De ellos, votaron un total de 4.568, y el 65 por ciento dieron el sí. Los sindicatos de la factoría consideran que ha sido un éxito, que es la línea correcta para dar más argumentos a GM de que Figueruelas es una fábrica a reforzar y a seguir considerando como estratégica en la estructura europea de la multinacional.

Los trabajadores, con este convenio, aceptan congelar los salarios durante este año y el próximo, subirlos un 1,25% en 2015 y un 1,5% en 2016 y en 2017. También aceptan ver recortados un 10% todos los pluses (festivos, nocturnidad y calendarios especiales), y estar abiertos a una mayor flexiblidad organizativa y en los turnos.

Eso sí, a cambio de estos sacrificios que aceptan los trabajadores, GM también tendrá que cumplir su parte: se compromete a que no habrá despidos en esta fábrica al menos hasta el año 2017, mantendrá el turno de noche, y acepta llevar a cabo ajustes en la contratación para permitir que a partir del año 2015 se creen más de 200 nuevos puestos de trabajo en esta planta. Además, deberá asignar a la factoría de Figueruelas la producción de algunos de los nuevos modelos que lanzará a partir del año 2016, condición que también es obligatoria porque, de lo contrario, el convenio que ahora han aceptado sus trabajadores no se cumpliría.