El debate sobre el Estado de la Nación no aclara el futuro político de Portugal

El líder del CDS-PP y todavía ministro de Exteriores, Paulo Portas , ha sido el encargado de encerrar el debate considerando que ha existido «contención» de todas las partes y que eso garantiza la posibilidad de «un compromiso de salvación nacional» tal y como ha pedido el presidente. Ha insistido en la idea de que el diálogo «tiene que comenzar, el exceso de crispación no resuelve nada». Y refiriéndose al pedido de dimisión que presentó hace diez días y que no fue aceptado por Passos Coelho, Portas se ha limitado a decir que primero Portugal, después el partido y después las circunstancias personales, citando al exlíder del PSD y antiguo primer ministro, Sá Carneiro.

El jefe del Ejecutivo ha pedido a los partidos que se centren en las necesidades del país y en el interés común de los portugueses. Y por ello ha desafiado al principal partido de la oposición, el PS, a que se siente en la mesa de la troika, algo que «no será fácil» pero sí positivo para el país. Es decir, quiere que los socialistas participen en las negociaciones que el Gobierno tiene con los responsables de la troika ( FMI, BCE y Comisión Europea ) para la aplicación del programa de ajuste. Un convite que no significa apoyar al Gobierno sino que «es el apoyo necesario al país para aquello por lo que pasamos ni vuelva a ocurrir».

Por su parte, el secretario general de los socialistas, Antonio José Seguro , ha comenzado su intervención en el debate pidiendo la dimisión del primer ministro a quien recordó que no es él quien define «los términos del proceso de diálogo» exigido por el presidente de la República. Un discurso que se ha ido suavizando aunque ha aprovechado la ocasión para definir su condición para que el proceso de compromiso tenga éxito: que el Gobierno reconozca que «su política falló, esa es la condición para cualquier diálogo, que debe estar basado en la realidad».

Salvación nacional

La presidencia de la República ha emitido hoy un comunicado confirmando la disponibilidad de los tres partidos para iniciar «lo más rápido posible, conversaciones con vista a un compromiso de salvación nacional que permita la conclusión, con éxito, del programa de ajuste financiero y el regreso a los mercados y que garantice la existencia de condiciones de gobernabilidad, de sostenibilidad de la deuda pública, de crecimiento de la economía y de creación de empleo». En las reuniones celebradas ayer entre el presidente y los líderes partidarios, por separado, Cavaco tuvo oportunidad de explicar mejor los términos del compromiso de salvación nacional que considera ser la mejor solución para los problemas nacionales. El presidente espera que las negociaciones entre los partidos «se concluyan en un plazo muy corto».