Así son los siniestros yihadistas más activos en internet

«Mataremos a todos los infieles, vais a pagar el tributo». De 20 años, es de Castillejos, aunque vinculado a Ceuta. Ve justificado atacar a España por el «apoyo» a Israel y por su implicación en Afganistán e Irak. «Sí, con vuestro apoyo a Israel estáis -tácitamente- luchando contra nosotros. Soy marroquí, conozco a militares españoles que lucharon contra los musulmanes tanto en Afganistán como en Irak». «En España musulmanes y cristianos conviven, ¿estáis dispuestos a atacar musulmanes?», se pregunta. «Los musulmanes no se ubican en las iglesias. Atacaremos vuestras iglesias». «¿Quieres atacar mi país?», plantea el interlocutor. «Sí, lo voy a atacar y será un placer para mí. Porque soy musulmán y tú eres un cristiano». «...Mataremos a todos los infieles».

«Se degüella a los que tienen una religión distinta». Cuando amenaza con perpetrar atentados en España, lo expresa de manera más definida que otros yihadistas. Así, al margen del discurso sobre la recuperación de Al Andalus, advierte de que «atacarán pronto» y menciona objetivos concretos, como «ayuntamientos y comisarías». «¿Por qué el degollamiento de personas?», se le plantea en una conversación del pasado mes de agosto. «Porque tienen una religión distinta a la religión de Allah», responde en una demostración de paupérrima preparación cultural.

En el mismo contacto, advierte de que «combatiremos hasta que la religión de Allah sea la que juzgue el mundo». «¿También en Marruecos?». «Nuestro sueño es llegar a Al Andalus», responde.

«La degollación está permitida en el islam, son de traidores». «Kokito Castillejos» es uno de los perfiles más violentos de los analizados por José María Gil Garre. Este individuo, que combate en Siria desde 2013, ha reaparecido hace poco en las redes sociales para proseguir las amenazas.

El pasado 27 de junio mantuvo un contacto con Gil Garre, a quien advirtió: «Tú tienes dos posibilidades, convertirte al islam, y en este caso serás honrado, o si no pagar el tributo de los humillados. De no aceptar una de estas dos posibilidades, la relación que nos unirá será sangrienta, será una relación de degollamiento». Su crueldad fue conocida cuando aparecieron fotos en las que se le ve junto a varias cabezas cortadas. «Esas cabezas cortadas son de traidores y agentes de Estados Unidos y Al Salul...». «La degollación está permitida en el islam», sostiene.