Tres miembros de Juventudes socialistas piden la dimisión de Beatriz Talegón por «no predicar con el ejemplo»

En concreto, Talegón afirmó la semana pasada en dicha reunión que le «sorprende mucho» cómo pretenden los líderes socialistas «promover la revolución desde un hotel de cinco estrellas en Cascais (Portugal), llegando en coches de lujo», y preguntándose cómo así pueden dar a los ciudadanos una respuesta». Tras la repercusión y la «ola mediática» desatada a causa del discurso de la dirigente de Juventudes, Bujosa y los militantes Rubén García y Mikel Zabala han firmado una carta, recogida por Europa Press, en la que reconocen sentir «cierto pudor por esas declaraciones. A su juicio, Talegón no es «congruente» con el discurso que pronunció ante los líderes de la Internacional Socialista porque, entre otras cosas, percibe un «gran salario» que está muy por encima de las posibilidades de cualquier joven» A pesar de que desde el principio dejan claro que están «profundamente de acuerdo» con «el fondo» del discurso de Talegón porque «se han cometido y se siguen cometiendo errores», los firmantes de la misiva consideran que no es «la persona adecuada para hablar de que los jóvenes de la Internacional Socialista no tienen apoyo financiero de la misma».

Tampoco creen que Talegón deba «hablar de puestos de confianza o 'puestos a dedo', ya que entienden que «son necesarios».«¿A quién si no va a contratar un partido? A gente de confianza. Sin embargo tú, pese a tener menos de 30 años ya sumas en tu haber varios de ellos, y encima de atreves a criticarlos», añaden. Bujosa, García y Zabala insisten en que no quieren que su carta «sea entendida como una crítica contra el contenido» del discurso de la secretaria general de la Unión Internacional de Juventudes Socialistas, sino que su intención es «hacer ver que quien no predica con el ejemplo no puede dar lecciones aprovechando la falta de conocimiento del resto sobre uno mismo». Asimismo, los tres miembros de Juventudes reprochan a Talegón que criticara a los líderes socialistas por utilizar a los jóvenes sólo para recoger firmas o pegar carteles. «No pensamos que sea algo menor, como insinuaste con los colegas portugueses, sino que esta anécdota sirve para decirte que más suelo de la calle que pisamos, no creo que lo hayas pisado tú», señalan, tras lo cual recalcan que lo hacen «poniendo dinero» de sus «bolsillos» y «sin la remuneración alta» de la que opinan que disfruta Talegón.

Respondiendo a las críticas, Talegón ha explicado que su salario son 1.500 euros netos, una cantidad que no es «para tirar cohetes» en Viena, donde vive y paga otros 1.000 euros al mes en impuestos. «Y no me importa», ha añadido. Tras señalar que tampoco viaja en primera clase, ha manifestado que le parece «feo» que digan esas cosas sobre ella. «Demuestra un poquito, a todo el mundo que tenga un poco de inteligencia, por dónde van los tiros y qué es lo que hay detrás, pero para mí es muy fácil poner los papeles sobre la mesa», ha dicho.