Cataluña ahorrará 8.000 millones en intereses gracias a la ayuda del Estado

Esta es la cantidad que Cataluña habría tenido que pagar de más hasta el vencimiento de la deuda si el gobierno regional hubiera acudido directamente al mercado para financiarse, o lo que es lo mismo, el extra de intereses, la prima de riesgo que hubieran exigido los inversores a la Generalitat por prestarle ese dinero. Y eso, en el caso de que los inversores hubieran decidido financiar al gobierno autonómico, lo que en los momentos más álgidos de la crisis, era muy poco probable.

En el verano de 2012, el Tesoro español llegó a pagar casi un 7% por colocar bonos a 10 años -ahora el coste es de poco más del 2%- y las autonomías más endeudadas y con déficit más elevados, como era el caso de Cataluña, tenían directamente cerrados los mercados . Si el Estado no hubiera acudido en auxilio de esta autonomías en apuros, y hubiera captado ese dinero en los mercados internacionales para luego cederlo a los gobiernos autonómicos, muchas de ellas hubieran quebrado, y desde luego Cataluña lo hubiera hecho, según coinciden en señalar todos los analistas consultados.

De hecho, la región que preside Artur Mas ha sido la más beneficiada por estas medidas de auxilio puestas en marcha por el Gobierno central. Según fuentes de la administración, un tercio de las ayudas concedidas -unos 120.000 millones de euros- y, por tanto, de los intereses ahorrados, han ido a parar a la Generalitat. Los cálculos, apuntan las citadas fuentes, se han realizado teniendo en cuenta una vida media de la deuda de seis años.

El Fondo de Liquidez autonómica se creó en julio del año 2012, en el momento más crítico de la crisis de deuda, con el fin de dotar de liquidez a las comunidades autónomas, permitiendo conseguir financiación a un precio razonable y garantizando así la prestación de los servicios esenciales. A cambio de recibir esta financiación, el Ministerio de Hacienda aumenta el control sobre el cumplimiento de los objetivos de déficit.

Acogerse a esta especie de rescate autonómico tuvo un carácter voluntario. De hecho en 2012 solo nueve de las diecisiete autonomías solicitaron financiación del mismo -Cataluña, Comunidad Valenciana, Andalucía, Castilla-La Mancha, Canarias, Baleares, Murcia, Asturias y Cantabria-. El resto han preferido pagar más intereses en 2012, 2013 y 2014, pero evitar el control extra de la Hacienda Pública, y el coste reputacional de necesitar ser rescatado por el Estado.

Cataluña ha sido, con creces, la autonomía que más dinero ha recibido del FLA: casi 6.700 millones en 2012, cerca de 11.000 en 2013, y este año prevé obtener más de 7.000, en total casi 25.000 millones de euros (ver gráfico adjunto) de los 59.000 que el Estado ha repartido entre todas las autonomías, es decir, casi el 42% del total. La Comunidad Valenciana y Andalucía son las siguientes que más dinero han recibido del fondo de liquidez, aunque a mucha distancia, menos de la mitad que Cataluña en estos tres años.

La región que preside Artur Mas es también una de las que más se ha aprovechado de los distintos planes de pago a proveedores que el Estado Central ha puesto en marcha para las comunidades se pusieran al día en los pagos a las empresas que les proveían de bienes o servicios. Hasta el pasado mes de marzo, había recibido casi 6.500 millones de euros a través de estos planes, y esta cifra se sigue incrementando.

En este caso, no obstante, no es la región que más dinero ha recibido. Por delante está la Comunidad Valenciana, que hasta primeros de año había recibido más de 7.500 millones.