Rajoy anuncia que el déficit público cerró por debajo del 7% en 2012

Rajoy ha realizado este anuncio en la primera jornada del Debate del estado de la Nación, donde ha explicado que la reducción del déficit repartido entre ingresos y gastos fue de 21.000 millones de eueros en 2012.

Entre los logros económicos conseguidos por el Gobierno, Rajoy ha destacado el superávit en la balanza de pagos obtenidos de julio a noviembre (a falta de datos de diciembre), que según el presidente servirá de «base para la recuperación del empleo». También se prevé la misma tendencia en 2013, según los cálculos gubernamentales.

A pesar de que el líder del Ejecutivo ha asegurado que es pronto para hablar de recuperación y ha evitado caer en un «optimismo vacío»: «nada de brotes verdes ni anticipos primaverales». Rajoy ha centrado la primera parte de su intervención en repasar los avances del primer año y medio de legislatura.

En este sentido, Rajoy ha indicado que España ha dejado atrás «la inminencia del desastre» y ha añadido que empezamos a ver «la senda del futuro». Por ello, se ha referido a un «giro» de la situación, aunque ha reconocido que «no hemos llegado al final del viaje».

Durante su comparecencia, el presidente del Gobierno ha admitido que incumplió con sus compromisos electorales al subir el IRPF. «Escogimos una senda temporal de renuncias y estrecheces», ha justificado. Para demostrar que el esfuerzo no ha sido en vano, ha recordado que los ingresos por la subida de impuestos (Renta, especiales y Sociedades) ha supuesto un crecimiento de la recaudación de 11.200 millones; que se suman a los ingresos por la lucha contra el fraude con 11.500 millones.

Antes de desgranar la «segunda fase de reformas» ( leer aquí la batería de medidas ), Rajoy ha exhibido también los éxitos de la reforma laboral aprobada en Consejo de Ministros el pasado febrero. «Desde la entrada en vigor de la reforma se han firmado más de 55.000 contratos, lo que suponen el mayor registro de los últimos cinco años. Además, ha recordado la decisión de empresas del sector de la automoción como Renault, Nissan, Audi, Ford e Iveco para aumentar la producción en territorio español.