Suscribete a
ABC Premium

Freud y los cantos de sirena

HERMANN TERTSCH

«LOS atentados nos dan cada vez más asco», nos gimoteaba ayer desde Ajurianea un Juan José Ibarretxe incapaz de percibir la visita tramposa que le estaba haciendo en aquel instante el psicoanalista vienés. Sigmund Freud de paseo por Ajuriaenea. Como la mayoría ... no sabemos cuánto asco es capaz de sentir el lendakari, alguien debería haberle preguntado desde cuándo percibe cierto asquillo a los atentados, cuando el asco comenzó a aumentar y si este último atentado en Santoña le produce ya un ascazo inaguantable o si todavía, con ser mucho, lo considera soportable. No vamos a ser injustos. Seguro que Ibarretxe lamenta la muerte de ayer como todos los demás políticos que condenan el atentado y como toda la gente de bien. Pero habrá de comprender que aquellos que hemos sentido siempre todo el asco posible hacia los atentados, sintamos ya insoportable la náusea. Por los crímenes, pero también por la invariable matización que siempre llega. Y vendrá.

Artículo solo para suscriptores

Esta funcionalidad es sólo para suscriptores

Suscribete
Comparte esta noticia por correo electrónico
Reporta un error en esta noticia