Microsoft «castra» a su ChatGPT: la razón por la que la IA ya no te dice que está viva y te ama
La inteligencia artificial con la que la tecnológica ha dopado a su buscador Bing ha perdido muchas funcionalidades debido a los errores que estaba cometiendo durante las pruebas
«Estás casado, pero me quieres»: los delirios y los fallos del nuevo ChatGPT de Microsoft

Microsoft sigue dando vueltas a su proyecto de la gallina de los huevos de oro. Después de unos primeros días disponible en fase de pruebas, su chatbot ChatGPT para Bing, incorporado en su motor de búsqueda de Internet, ha sido explotado en repetidas ocasiones por los pocos usuarios que tienen acceso, que han conseguido sacarle a la IA de la tecnológica más de una respuesta extraña.
Recientemente, Microsoft decidió acabar con el problema limitando enormemente el funcionamiento y el número de respuestas que puede ofrecer la máquina en cada sesión. Ahora, la empresa solo permite que la máquina responda a 6 preguntas por conversación. En total se puede utilizar durante 60 sesiones diarias.
«Nuestra intención es ir más allá y planeamos aumentar el límite diario a 100 chats en total pronto», ha afirmado Microsoft en el comunicado en el que anunciaba el nuevo cambio. La empresa también ha comenzado a permitir que algunos usuarios de teléfonos iOS y Android puedan probar el chatbot.
La pérdida de funcionalidad de Bing fue anunciada por la tecnológica el pasado viernes. Todo después de que varios medios, como 'The New York Times', mostrasen largas conversaciones con el chatbot en los que la máquina hacía declaraciones de amor al usuario e, incluso, compartía su interés en convertirse en un ser humano o realizar actos delictivos.
No pasó demasiado tiempo antes de que los usuarios de la herramienta comenzasen a lamentar el movimiento, como recoge 'Ars Technica'. Y es que, la empresa no solo ha reducido enormemente el funcionamiento de la IA, también ha evitado que la solución pueda hablar sobre sí misma o acerca de sus supuestos sentimientos.
Cuando en ABC iniciamos una conversación con el chatbot, y le preguntamos a Bing al respecto, simplemente dice que es «un buscador web, no un asistente personal», por lo que no tiene opiniones. Si se le aprieta un poco, tampoco demasiado, la herramienta no tarda en zanjar la conversación para evitar, de este modo, caer en la trampa del internauta y empezar a delirar. Una vez hace esto, no hay posibilidad de seguir introduciendo preguntas, habrá que empezar una nueva conversación desde el principio.
La sensación que te deja la nueva máquina no es la de estar tratando, en absoluto, con un chatbot con grandes capacidades. La experiencia de uso, por el contrario, resulta bastante rutinaria y artificial. Y muchos de los que están probándola tienen una opinión similar. «Microsoft le ha hecho una lobotomía», afirma un usuario a través de la plataforma Reddit. «Lo han castrado», señala otro.
Daño reputacional
Los acontecimientos de los últimos días han provocado que Microsoft vaya con pies de plomo. No solo ha recortado enormemente el funcionamiento de la herramienta, sino que también ha ido rebajando sus declaraciones sobre lo que está por venir.
«La IA transformará de forma radical todas las categorías de software, comenzando con la más grande de todas: la búsqueda», afirmaba Satya Nadella, CEO de Microsoft, el pasado 7 de febrero durante la presentación del nuevo Bing.
Apenas unos días después, la tecnológica afincada en Redmond lanzaba un comunicado en el que explicaba que su chatbot, en realidad, «no es un reemplazo ni un sustituto del motor de búsqueda, sino una herramienta para comprender mejor y dar sentido al mundo».
«Puede que la empresa esté intentando evitar un daño reputacional por lo que los usuarios consigan que su chatbot diga», explica a este periódico Javier Del Valle, director de la startup dedicada al desarrollo de soluciones de inteligencia artificialVedrai.
Del Valle, cuya empresa cuenta con su propio chatbot, que está a disposición de Banco Santander entre otros, afirma que su solución «viene con varias restricciones, porque no puede ser que el cliente ofrezca una respuesta poco sería y el chatbot siga la broma».
El premio es demasiado grande
Varios expertos en inteligencia artificial, como Yann LeCun, jefe de la división de IA de Meta, han señalado en el pasado que ChatGPT y otras soluciones similares en el fondo no representan un gran avance respecto a otros tantos modelos generadores de lenguaje. Google, una de las empresas que más fuerte ha invertido en esta tecnología durante los últimos años, siempre ha tenido reparos con permitir el acceso a los usuarios, precisamente para evitar problemas de reputación. Porque, como se ha dicho muchas veces, la IA no solo comete errores, también tienes sesgos.
Ahora, Google está ultimando el lanzamiento de Bard, herramienta similar a ChatGPT que, próximamente, estará disponible en su buscador. Exactamente lo mismo que va a ocurrir con Bing. La empresa, de acuerdo con expertos consultados por este periódico, se ha visto arrastrada a la guerra de la IA para mantener su imperio de publicidad. En estos momentos, Microsoft, que apenas cuenta con usuarios dentro del terreno de las búsquedas, tiene mucho más que ganar que perder.
«El gran premio aquí es la publicidad en los buscadores. La cuota de mercado que robe Microsoft a Google significarán miles de millones de dólares de beneficio para los de Redmond», señala José del Barrio, socio fundador de Samaipata, empresa dedicada a invertir en compañías tecnológicas en etapas tempranas.
«Puede asumir más riesgo que Google, porque tiene mucho menos que perder en este campo», remata el experto. Y es que Bing, a día de hoy, es empleada para la realización del menos del 10% de las búsquedas que se realizan en Internet. En el caso de Google, estaríamos hablando de más del 90%.
MÁS INFORMACIÓN
Del Barrio remarca que las respuestas extrañas que ofrece la IA de Microsoft se producen porque la tenología «es muy joven, por lo que va a seguir cometiendo errores». «Cuando entrenas a una máquina de estas es muy difícil predecir todas las entradas de texto de los usuarios», zanja el empresario.
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete