El Barça aplasta a una Real Sociedad inoperante
El Barcelona finalizó su semana fantástica con una victoria que completa un pleno de tres en ocho días y que saldó esta vez con "una mano" (5-0) a la Real Sociedad, que asistió impasible al festival azulgrana.
Sin Darko Kovacevic, el conjunto realista se mostró completamente inoperante en ataque y su falta de ambición le condenó a una goleada que se ganó a base de pasividad y conformismo.
El equipo de Frank Rijkaard se plantó bien ya desde el inicio sobre el campo, empezó a tocar el balón y desarboló a un rival que apenas aguantó el pulso dieciocho minutos.
El conjunto donostiarra acababa de acercarse por primera vez con peligro al área de Valdés y parecía que había encontrado el talón de aquiles del Barcelona en la banda que cubría Sylvinho, pero Mark van Bommel atajó de golpe cualquier aspiración realista de dar la sorpresa en el Camp Nou.
Una pérdida de balón de la Real Sociedad, reclamada por sus jugadores como falta de Andrés Iniesta, acabó en un contragolpe azulgrana conducido por Ronaldinho, que envió el balón al área para la llegada desde atrás de Van Bommel, que empalmó un fuerte disparo al fondo de la red.
El conjunto vasco, tras el tanto encajado, aún tuvo arrestos para buscar de nuevo la banda de Sylvinho, pero, poco a poco, fue echándose atrás ante el dominio barcelonista hasta que, después de un disparo de Iniesta desde la frontal, acabó completamente encerrado en su campo.
Una llegada en solitario de Nihat al área de Valdés, quien primero erró en su salida y después reaccionó al detener el disparo del turco, fue poco más que un espejismo cumplida la primera media hora de juego.
El conservadurismo realista alcanzó tales dimensiones que Ronaldinho empezó a combinar sin pasar del medio campo para provocar a los jugadores rivales y hacerles entender que eran ellos los que tenían que atacar sin querían aspirar a algo más que a salir derrotados del Camp Nou.
La fórmula no funcionó y el brasileño se sacó entonces de la chistera una solución mucho más elegante en forma de disparo desde la frontal que batió a Riesgo. Con 2-0, la Real tampoco varió mucho sus planteamientos, consciente de que cada vez que atacaba recibía contragolpes de máximo peligro.
A tres minutos del descanso y con el Barcelona jugando a placer, las luces del Camp Nou hicieron un amago de apagarse, aunque todo acabó en bajada de intensidad lumínica que detuvo el juego hasta la conclusión de la primera parte.
Con el problema técnico solucionado y tras el paso obligado por los vestuarios para recuperar fuerzas, el Barcelona estableció de nuevo su dominio ante un rival sin ambición alguna que parecía dispuesta a hacerle el juego al equipo de Frank Rijkaard.
Ronaldinho, por su parte, estaba crecido y lo demostró en el minuto sesenta con su segundo tanto, el tercero del conjunto azulgrana, que consiguió en un lanzamiento de falta directo.
Para colmo de males para la Real Sociedad, Uranga fue expulsado en el minuto 68 al ver su segunda cartulina amarilla tras una dura entrada sobre Iniesta.
A un cuarto de hora para el final hasta el capitán Puyol se sumó a la fiesta goleadora y marcó el cuarto de su equipo con un remate de cabeza tras saque de esquina de Sylvinho. Con el partido decidido, Frank Rijkaard completó sus cambios y dio descanso a jugadores básicos para el partido de Liga de Campeones del miércoles, al tiempo que brindó la ovación a Ronaldinho y Eto'o. Larsson, sustituto del camerunés, completó la fiesta con el tanto que redondeaba el 5-0.
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