Acusada una «web» de aceptar un soborno
La censura sobre el escándalo de la leche contaminada no se ha ceñido sólo a los medios de comunicación, ya que numerosos artículos y comentarios han sido borrados de portales de internet, como Sina, Sohu o NetEase, tras recibir presiones del Gobierno o incluso sobornos por parte de la empresa láctea Sanlu.
De hecho, otro de los principales buscadores de China, Baidu, se vio obligado a emitir un comunicado negando haber recibido tres millones de yuanes (unos 300.000 euros) a cambio de filtrar los mensajes negativos sobre el fraude. Sin embargo, los responsables de Baidu sí reconocieron que los encargados de relaciones públicas de Sanlu se pusieron en contacto con ellos hasta en dos ocasiones, el 9 y el 12 de septiembre, para eliminar las referencias al escándalo.
Oferta económica
Aunque Baidu no indicó si había recibido alguna oferta económica a cambio, indicó en su comunicado que se había “negado rotundamente” a la petición de Sanlu porque “violaba las normas de la compañía y sus principios de transparencia”.
Cierto o no, el rumor ha dañado la credibilidad de la página “web”, que ha sido duramente criticada por numerosos internautas en los foros de la “Red”. Para ello, además, se basan en datos contrastados que resultan apabullantes. El 12 de septiembre, la búsqueda en Google del escándalo, a través de palabras clave como “Sanlu”, “leche”, “salud”, “niños”, arrojaba 11.400 resultados, mientras que en Baidu sólo había once.
Por otra parte, un periodista que empezó a investigar el monumental fraude denunció que la marca láctea había intentado sobornarlo tanto a él como a las primeras familias afectadas por la intoxicación con melamina.
Dichos problemas para informar son frecuentes en China, la mayor cárcel del pensamiento del mundo al mantener entre rejas a más de 60 periodistas y “ciberdisidentes” por expresar su opinión o simplemente hacer su trabajo.
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