El Porvenir incorpora en unos días un nuevo lugar de reunión alrededor del pulpo, el buen vino y esa mezcla tan natural entre Galicia y Andalucía que Furancho ha sabido hacer suya desde que abrió. El equipo de Iván Yáñez y Rocío López ... ultima los detalles de Cabanote do Furancho, un espacio que nace pegado al local principal y que llega como ampliación, pero con personalidad propia.
El nombre no es casual. En Galicia, un 'cabanote' es una construcción sencilla junto a la casa donde se guardan herramientas, leña o los aperos del campo. Un lugar auxiliar, humilde, práctico. Y ese es precisamente el espíritu con el que nace este nuevo rincón: un espacio más informal, enxebre y directo, donde la carta de Furancho seguirá presente, pero el ambiente cambia.
Un segundo hogar junto al primero
El antiguo Telepizza que compartía medianera con el restaurante ha permitido a Furancho algo que venían necesitando desde hace tiempo: más metros y más calma. La idea no es duplicar el concepto, sino abrir una estancia paralela con otro ritmo. Cabanote quiere ser ese sitio al que entrar sin reserva, tomar un vino, pedir un par de raciones y alargar la sobremesa sin prisa. Mismo ADN, distinto cuerpo.
El equipo lo presenta como una prolongación natural del proyecto: mismo producto, misma cocina gallega-andaluza, pero un ambiente más relajado, con menos protocolo y más «vamos entrando». No buscan un segundo restaurante, sino una casa contigua, ampliada a golpe de necesidad.
Qué se podrá comer en Cabanote
Aunque aún no han desvelado la carta definitiva, sí está claro que compartirá el recetario de Furancho, un cruce entre pescados y mariscos gallegos y cocina andaluza que ya forma parte de la identidad del proyecto. Medias raciones y raciones de elaboraciones tradicionales, pulpo, marisco de concha, pescados del día... etc.
También habrá espacio para los clásicos de su abacería —quesos nacionales, ibéricos, tostas, gildas— y para sus picoteos habituales, como las croquetas o la tortilla jugosa estilo Betanzos. Todo ello acompañado de una carta de vinos donde conviven Ribeiro, Rías Baixas y tintos andaluces con otras referencias clave del panorama nacional.
Un proyecto que sigue creciendo
Desde que el primer Furancho abrió junto al parque de Miraflores en 2019, el proyecto ha ido afinando su rumbo. La mudanza a El Porvenir en 2022 les permitió asentarse y ampliar la experiencia, pero la demanda ha sido tal que el equipo llevaba meses buscando más espacio. Cabanote llega como respuesta a ese crecimiento orgánico: una ampliación que no cambia el concepto, pero sí la forma de vivirlo.
La apertura se anunciará en los próximos días, aunque el equipo ya adelanta que será «muy pronto». En cuanto suba la persiana, El Porvenir tendrá dos puertas para entrar en el mismo universo: Furancho y Cabanote, dos ambientes, una cocina y un mismo acento 'gallegoandalú'.
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