Veganí

En esta aventura la acompaña su pareja Andrés, quien se encuentra al timón de los forgones y se ha encargado de diseñar esta primera carta.Andrés estudió cocina en la Escuela de Hostelería Gambrinus y ha trabajado en renombrados espacios gastronómicos como elBulli, de Ferran Adrià, así como en Tohqa y La Cosmo junto a Paula.

En su local de la calle Feria apuestan por los productos ecológicos, de temporada y de cercanía (siempre que sea posible).

La idea es acercar la cocina vegetal a todo el mundo, sigan o no una dieta vegana. Es por eso que sus fondos, salsas y sofritos llevan largas cocciones para que el «chupchup» de las ollas aporten ese umami en todos los platos y acabes por «no echar de menos» las carnes o pescados.

Con presentaciones esmeradas y emplatados cuidados, esta propuesta es una forma de «Acabar con el estigma del veganismo», como explica Paula, y «volver a los sabores de siempre y reencontrarse con las verduras, porque siempre las hemos comido y por sí solas, están buenísimas».

El local es bastante amplio, con una capacidad de 40 personas aproximadamente. Luminoso, diáfano y rodeado de ventanales, ofrece una decoración limpia y despejada en tonos de madera clara, paredes blancas y elementos decorativos en verde menta.Cuenta con una barra con taburetes, una zona de mesas altas para picoteo más informal y una zona de mesas para almorzar con más tranquilidad.