Este desembarco supone la llegada del primer restaurante especializado en hot pot —la llamada fondue china— al centro de Sevilla, acercando una de las experiencias gastronómicas más populares de Asia a quienes quieran vivirla sin salir del casco urbano.
La experiencia hct pot: cocinar en la mesa
El concepto no podría ser más participativo: en cada mesa se coloca una olla caliente con caldo que se mantiene siempre a temperatura constante. Cada comensal elige los ingredientes —carnes, verduras, setas, mariscos, tofu o fideos— y los cocina al momento, sumergiéndolos en el caldo durante unos segundos. Luego llega el toque personal: mojar el bocado en una salsa que el cliente prepara a su gusto, combinando ingredientes de una amplia barra con más de una veintena de opciones.
En Yuan Laosi pueden elegirse entre cuatro tipos de caldos: picante de Sichuan, de tomate, de setas o de huesos, servidos en ollas individuales o combinadas de dos o tres sabores. La carta es amplia y sorprendente, con más de un centenar de ingredientes que van desde el wagyu y la ternera Angus hasta el pescado picado, las vieiras, el tofu frito o las algas. Todo se corta en porciones finas para que el tiempo de cocción no supere el minuto.
Una experiencia diferente
La propuesta se completa con postres típicos como el pastel de arroz glutinoso o la gelatina de melaza, además de bebidas asiáticas y licores chinos. No hay espectáculo, pero sí un formato distinto: una comida que se comparte, se cocina y se conversa al mismo tiempo.
Con Yuan Laosi, Sevilla suma un nuevo acento a su panorama gastronómico, uno que se comparte, burbujea y se disfruta a fuego lento, plato a plato.
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