Justicia conculca la voluntad de las Cortes con las nacionalizaciones masivas
Congreso y Senado rechazaron usar la ley de Memoria para hacer españoles a nietos e hijos de no exiliados
El Ministerio de Llop lo decretó después argumentando que era «la verdadera voluntad del legislador»
Sofía Puente, la directora de Seguridad jurídica que no atiende a la prensa pero sí la critica en redes

El Congreso y el Senado rechazaron utilizar la nueva Ley de Memoria Democrática para conceder la nacionalidad a los hijos y nietos de españoles que lo solicitaran, como está haciendo el Gobierno. Ambas cámaras se posicionaron así en sendas votaciones celebradas el 14 ... de julio y el 4 de octubre del año pasado, ante dos enmiendas impulsadas por Ciudadanos para ampliar la concesión de ciudadanía a cualquier descendiente de español hasta segunda generación. El entonces proyecto de ley de Memoria contemplaba circunscribir esa concesión a los hijos y nietos de exiliados. Al resultar rechazado el cambio propuesto por la formación naranja, esa redacción fue la que resultó finalmente aprobada.
Solo tres semanas después
Este rechazo de las Cortes invalida el argumento de que, en realidad, ambas cámaras sí querían conceder la nacionalidad a los hijos y nietos de emigrantes españoles, y no solo de exiliados, aunque la ley de Memoria dijera lo contrario. Y este punto es clave, porque este es el razonamiento único que utilizó el Ministerio de Justicia para introducir esa reforma por la puerta de atrás.
«Es posible encontrar una interpretación más acorde con la verdadera voluntad del legislador y el espíritu de la ley», defendió la directora general de Seguridad Jurídica, Sofía Puente Santiago, en la polémica instrucción publicada el pasado 26 de octubre en el Boletín Oficial del Estado. «Parece lógico entender que el legislador no ha querido excluir del ámbito de aplicación de esta ley a los que se encontraban en la situación descrita», añadía en referencia a los hijos y nietos de españoles emigrados por cualquier razón distinta al exilio. «Sino que ha refundido en un solo párrafo los dos supuestos», subrayaba, para ampliar la concesión de nacionalidad a todos los hijos y nietos de españoles. «Así, este primer párrafo, recogería dos supuestos distintos de opción, el de: 'Los nacidos fuera de España de padre o madre, abuelo o abuela, que originariamente hubieran sido españoles' y, además, ('y que') el de: 'Los nacidos fuera de España de padre o madre, abuelo o abuela, que originariamente hubieran sido españoles, y que, como consecuencia de haber sufrido exilio por razones políticas, ideológicas o de creencia o de orientación e identidad sexual, hubieran perdido o renunciado a la nacionalidad española», razona la instrucción. El rechazo del Congreso a esa posibilidad se había producido poco más de tres meses y medio antes. Del 'no' del Senado solo hacía tres semanas.
Y es que las dos enmiendas que Ciudadanos intentó impulsar sin éxito proponían, precisamente, incluir ambos supuestos -descendientes de emigrantes y de exiliados- en un solo párrafo. «Los nacidos fuera de España de padre, madre, abuelo o abuela que originariamente hubieran sido españoles, incluyendo aquellos como consecuencia de haber sufrido exilio por razones políticas, ideológicas o de creencia hubieran perdido o renunciado a la nacionalidad», fue la propuesta de la formación naranja tanto en el Congreso como en el Senado.
Mayoría abrumadora
En ambas cámaras, la enmienda de Ciudadanos fue rechazada por una amplísima mayoría absoluta. En el caso del Congreso fueron un total de 264 diputados los que votaron en contra, de los 346 que participaron en la votación. En este gran bloque del 'no' participaron los 120 diputados de la bancada socialista y los 33 de Unidas Podemos, sin que se produjera ninguna ruptura de la disciplina de voto en alguno de los dos partidos que forman la coalición gubernamental. La misma posición manifestaron algunos de los socios del bloque de investidura como EH Bildu, PNV, Más País o Compromís. Y también votaron en contra los parlamentarios del PP, la CUP, Coalición Canaria, Foro Asturias y los ex de Navarra Suma (Carlos García Adanero y Sergio Sayas), Ciudadanos (Pablo Cambronero) y Podemos (Carmen Pita). Una mayoría, por tanto, no solo especialmente sólida sino perteneciente a ideologías muy distintas.

La voluntad del legislador
No
264 (76%)
Si
27 (8%)
Si
No
Abs.
55 (16%)
Senado
Congreso
Fuente:Congreso y Senado / ABC

La voluntad del legislador
No
264 (76%)
Si
27 (8%)
Abs.
55 (16%)
Congreso
Si
No
Senado
Fuente:Congreso y Senado / ABC
En el bloque de las 55 abstenciones se situaron los diputados de Vox, Teruel Existe, el PRC y la portavoz de Junts, Miriam Nogueras. Esta última por error ya que sus compañeros de partido votaron a favor junto a Ciudadanos, ERC, y el PDeCAT, hasta sumar los 27 síes que alcanzó la iniciativa. Por su parte, optaron por no votar el portavoz de ERC, Gabriel Rufián, junto a otro diputado republicano, Joan Capdevial, y un parlamentario del PNV, Mikel Legarda. Este resultado puede encontrarse en la sesión 195 celebrada el 14 de julio de 2022.
Por su parte, la votación del Senado arrojó una mayoría aún más sólida ya que frente a los 350 representantes que tiene el Congreso, la Cámara Alta tiene 265 y 253 de ellos apretaron el botón del 'no'. Solo cuatro senadores votaron a favor, otros tres se abstuvieron y cinco se ausentaron. Esta votación tuvo lugar en la sesión plenaria número 56 celebrada el pasado 4 de octubre de 2022. El horizonte electoral de este año llevó posteriormente al PSOE a enmendarse a sí mismo y a lanzar una reforma de que ya se encuentra en manos del Tribunal Superior de Justicia de Madrid.
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