El brote de Ordicia arroja sombras sobre las elecciones a falta de solo cinco días para sacar las urnas

La razón por la que el Ejecutivo de Iñigo Urkullu escogió el mes de julio para sacar las urnas radicaba precisamente en que en época estival habría una menor incidencia epidemiológica . Sin embargo, los rebrotes se han sucedido en cada una de las provincias del País Vasco. Tras dar por superados los focos en puntos como los hospitales de Basurto o Txagorritxu, la principal preocupación se centra ahora en Ordicia, donde ayer se practicaron cerca de un millar de pruebas PCR. El resultado fue de 14 nuevos positivos , lo que eleva la cifra total hasta la treintena.

La situación preocupa. El Ejecutivo de Vitoria ha convocado para esta misma tarde una reunión de seguimiento en la que participarán representantes institucionales de los municipios cercanos. Sobre la mesa está la posibilidad de «cerrar» el pueblo, tal y como ha confesado en El Diario Vasco su alcalde, Adur Ezenarro. Lo cierto es que todavía se desconoce qué impacto puede tener el rebrote en la celebración de los comicios del próximo domingo. Por el momento, el secretario general de Unidas Podemos, Pablo Iglesias, ya ha suspendido el mitin que tenía previsto llevar a cabo estos días en Ordicia.

El caso guarda evidentes paralelismos con el de A Mariña, en Galicia, donde los contagios superan ya la centena. A pesar de ello, el presidente de la Xunta y candidato a la reelección, Alberto Núñez Feijóo, descartaba ayer que se vayan a suspender las elecciones. Tal y como publica hoy ABC, el dirigente popular aseguró que el derecho a voto de los confinados en este municipio está garantizado salvo aquellos que hayan dado positivo.

Al igual que en la Comunidad gallega, el temor a los rebrotes puede conllevar también un retroceso de la participación en las urnas, el gran temor de un PNV que precisamente reclama a sus simpatizantes que no se dejen llevar por los sondeos: « Quien no vaya votar, hará que su pieza falte y la construcción (del País Vasco) se retrasará», advertía ayer su presidente, Andoni Ortuzar.