El rol de Paul con confianza, pero paso a paso

Paul es un jugador que cuenta con la confianza de Manuel Pellegrini. De hecho, el preparador chileno ha llegado a asegurar públicamente que «es el sustituto natural de Guido Rodríguez en la plantilla» o «tengo mucha confianza en Paul, juega muy bien al fútbol». Pruebas claras de que el preparador santiaguino y su cuerpo técnico, más allá de que se produzcan movimientos en el centro del campo y que afecten al propio Guido o no, tienen crédito en el rendimiento que ya les ha ofrecido y que les puede ofrecer el centrocampista marfileño en el futuro más cercano.

Paul se hizo con un sitio en el primer plantel verdiblanco hace dos veranos cuando el Betis no tuvo manera de incorporar a un centrocampista defensivo que pudiera dar descanso al imprescindible Guido Rodríguez. Subió del filial y, de la mano de Pellegrini, fue sumando minutos en las rotaciones que el entrenador verdiblanco iba practicando y que en la finalizada temporada 21-22 con tantos partidos han sido la clave para el buen funcionamiento general del primer equipo bético. En el club verdiblanco se tiene mucha confianza en el futbolista costamarfileño, ya que ha demostrado con las oportunidades que se le han ido dando que ha mejorado aspectos como el técnico y el táctico dentro del terreno de juego, cambiando la aportación ofrecida en sus inicios en Heliópolis en el filial a las órdenes de Manel Ruano. De hecho, trabajar bajo las directrices de Pellegrini y su equipo técnico le ha venido igualmente bien en lo personal, dado que ha podido mostrar bastante crecimiento.

Pero a su vez se quiere ir con calma y poco a poco con él. Es joven, hace poco tiempo que ha dado el salto a la élite y aún tiene bastante margen de mejora en el fútbol profesional. Así que, aún contando con Paul, si se produjera una venta de Guido, el club, como así ha sido petición expresa de Pellegrini en caso de que se produzca el traspaso de alguno de sus futbolistas más importantes, como es el caso del pivote defensivo argentino, reforzará esa parcela del campo para que el equipo no pierda el nivel mostrado en esa zona de juego, clave para el preparador chileno.

Paul acabó con un problema de rodilla el curso 20-21, el primero de Pellegrini en Heliópolis, lo que le costó entrar a buen ritmo en la pretemporada. Luego, cuando el equipo estaba ya trabajando en la época estival, se infectó con la malaria, enfermedad que tuvo que superar para poder ser uno más. A partir de ahí, en la temporada 21-22, Paul ha jugado un total de once partidos oficiales, ocho de LaLiga, dos de la Liga Europa en la fase de grupos y uno de la Copa del Rey, ya que durante octubre y noviembre sufrió unos problemas musculares que, además, le hizo quedarse fuera de la lista de la UEFA para las eliminatorias ante el Zenit y el Eintracht, hecho que el Betis aprovechó para inscribir a Joel Robles y a Sabaly, también por la larga lesión de Montoya.

Pero además, en esta temporada de crecimiento individual, Paul también ha recibido la feliz noticia de convertirse en internacional absoluto con Costa de Marfil. Patrice Beaumelle, el pasado mes de marzo, convocó al futbolista del Betis para los partidos amistosos del combinado africano ante dos gigantes europeos, Francia e Inglaterra. Fue el 25 de marzo, en el Velodrome de Marsella, Paul debutó oficialmente con Costa de Marfil. Jugó los últimos catorce minutos del choque ante el equipo de Didier Deschamps. Luego, contra Inglaterra en Wembley entró al partido poco antes del pitido final del encuentro. Ahora, en el mes de junio, Paul ha sido convocado por Jean-Louis Gasset para jugar partidos de clasificación para la Copa de África de 2023, que precisamente se jugará en Costa de Marfil. Acumuló minutos también ante Zambia y Lesoto.