Cumbre del Clima
Desde bienvenidas a tomar notas: así es la tibieza del lenguaje climático
Los textos finales de las cumbres del clima huyen de verbos o palabras duras para lograr el mayor consenso posible
En todo tratado internacional se negocia hasta el más mínimo detalle, una coma mal colocada puede provocar una interpretación distinta de la planificada e, incluso, cambios en la legislación de un país. En las cumbres del clima ocurre lo mismo, porque «estas fórmulas son normales ... en este tipo de acuerdos», señala José Luis García, portavoz de Greenpeace España. Aunque «es fundamental, ya sea de la COP de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (CMNUCC), o la del Convenio sobre la Diversidad Biológica (CBD) o de otras convenciones, porque implica adquirir compromisos que luego tienen impactos en el plano nacional», destaca Ana Barreira, directora del Instituto Internacional de Derecho y Medioambiente (IIDMA).
No es lo mismo podrían que deben, como tampoco es lo mismo instar que obligar. Los textos finales de las cumbres del clima suelen agrupar decenas de palabras con numerosos artículos y decisiones. «La mayoría de estas son declaraciones de intenciones», apunta García. «Son un contenido muy político y sirve para poco», añade el portavoz ecologista. «A algunos países, como Estados Unidos, les gustan las lagunas jurídicas», denuncia desde Dubái Brandon Wu, director de Política y Campañas de Action AID USA. «¿Quién pide ambición y quién se esconde detrás de un lenguaje débil?», añade.
Los textos definitivos de las cumbres climáticas contienen construcciones como «damos la bienvenida», «acoge con satisfacción», u «observa con preocupación». «Los acuerdos de Naciones Unidas y también los de la Unión Europea usan este formato», destaca García. «Es la parte que podemos decir son los declarando», destaca. Aunque no hay una directriz oficial, Naciones Unidas tiene una serie de recomendaciones para la escritura del texto. El verbo más 'poderoso' es «instruir». Con esta palabra, la Convención Marco de Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (CMNUCC) «instruye al grupo a desarrollar su trabajo». Sin embargo, este concepto es muy poco usado. Los más utilizados son «solicitar», «instar» o «invitar». En otras ocasiones, muy pocas, también se usa «se urge», pero en contadas ocasiones.
COP 22
Marruecos | 2016
Marruecos se convirtió en la primera Conferencia de las Partes (COP22) de la CMNUCC tras el gran Acuerdo de París. Esta cumbre en la capital marroquí sirvió para comenzar en el planteamiento del pacto surgido de la COP21.
«11. Decide que los progresos, la eficacia y el desempeño del Comité de adaptación cuelvan a examinarse en el 27º período de sesiones de la Conferencia de las Partes, con vistas a la adopción de una decisión adecuada sobre el resultado de ese examen;»
Los temas principales de esta cumbre fueron la gestión del agua y la descarbonización del suministro de energía. Las decisiones incluidas en el texto definitivo son un total de 13, cuyos puntos, en una amplia mayoría, incluyen instancias a las partes e invitaciones. Aunque, la presidencia de esta cumbre, que encabezó el periodista británico Nik Gowing, sí que observó algunos inconvenientes con las decisiones y acciones que tomaron las partes en los años precedentes.
«8. Observa con preocupación la falta de acuerdos bilaterales suscritos respecto de las prerrogativas e inmunidades para que el Fondo Verde para el Clima pueda llevar a cabo su labor;»
El Fondo Verde para el Clima es el mecanismo financiero de la CMNUCC y su objetivo es contribuir de manera ambiciosa a la consecución de los objetivos de mitigación y adaptación al cambio climático.
Tras el Acuerdo de París, un gran número de partes y de la sociedad civil esperaban que las promesas logradas un año antes se hicieran realidad. Sin embargo, no se convirtieron en acciones lo que provocó que muchos países calificaran como fallo esta cumbre.
COP 23
Alemania | 2017
Esta cumbre se realizó en la sede de la CMNUCC, pero bajo la presidencia de Fiji, que lideró las conversaciones. Ante la imposibilidad de acoger toda la infraestructura que supone la celebración de este evento. La COP23 permitió lograr un progreso significativo en las denominadas «Directrices de implementación del Acuerdo de París», más conocido como el «Reglamento de París», que son los detalles que determinarán cómo funcionará el Acuerdo en la práctica.
«18. Decide también convocar, en el 25º período de sesiones de la Conferencia de las Partes (noviembre de 2019), un ejercicio de balance sobre la aplicación y la ambició en el período anterior a 2020, con el formato empleado en el ejercicio a que se hacer referencia en el párrafo 17 supra, y en el que se examinen, entre otras cosas:»
En las casi 40 páginas de la cover decision, la presidencia de Fiji tomó nota en una veintena de ocasiones y también publicó alguna decisión, pero la amplia mayoría son para el año siguiente.
«A dedicated space will be provided in the dialogue, both during the preparatory and the political phase to facilitate the understanding of the implications of the Special Report by the Intergovernmental Panel on Climate Change on Global Warming of 1,5 ºC;»
Aunque la inclusión de limitar el calentamiento global, de acuerdo a los informes del mundo científico, a los 1,5 grados se produjo en París. La declaración final de la COP celebrada en Bonn (Alemania) en 2017 introdujo la cifra para pedir un espacio de diálogo para el mundo científico.
COP 24
Polonia | 2018
La COP24 viajó hasta Polonia y, concretamente, a la ciudad de Katowice. El objetivo de la conferencia era lograr una implementación total del acuerdo de París y tenía como cabeza visible a Michał Kurtykam, en aquel entonces ministro de clima y medioambiente de Polonia.
El texto final contó 11 decisiones en las que la palabra adaptación empezó a tomar peso en las páginas de la cover decision.
Un año después, la presidencia de Kurtykam mantuvo el mensaje de la ciencia de limitar el calentamiento global no más allá de los 2 grados y continuar el trabajo para hacerlo a los 1,5 grados. Una escritura que se enmarca en la página 15 del texto final y lo hace para establecer una petición de financiación y apoyo a los países del sur global.
«b) La prestación de apoyo financiero y técnico a las Partes que son países en desarrollo para sus medidas de adaptación y mitigación relacionadas con el mantenimiento del aumento de la temperatura media mundial muy por debajo de los 2 ºC con respecto a los niveles preindustriales y con la continuación de los esfuerzos para limitar ese aumento de la temperatura a 1,5 ºC con respecto a los niveles preindustriales;»
COP 25
Madrid | 2019
Tras Polonia, Madrid acogió la vigésimo quinta Conferencia de las Partes de la Convención Marco de Naciones Unidas sobre el Cambio Climático. Un evento que, en primer lugar, se iba a celebrar en Brasil, luego pasó a Chile y, finalmente, España.
Hasta el momento, es la cumbre más larga de la historia. «Cada vez hay más intereses y más efectos del cambio climático, tomar una decisión consensuada es muy complicado», advierte José Luis García de Greenpeace.
«12. Pone de relieve las dificultades a que se siguen enfrentando los países en desarrollo para acceder al apoyo en forma de financiación, tecnología y fomento de la capacidad, y reconoce la urgente necesidad de aumentar la prestación de apoyo a las Partes que son países en desarrollo a fin de fortalecer sus esfuerzos nacionales de adaptación y mitigación;»
La cumbre de Madrid se centró en los mercados de carbono que ocasionó grandes bloqueos, pero por primera vez apareció una frase contundente:
«3. Observa con preocupación el estado del sistema climático mundial;»
«3. Vuelve a poner de relieve con grave preocupación la necesidad urgente de resolver el importante desfase que existe entre el efecto agregado de los esfuerzos de mitigación de las Partes, expresado en términos de las emisiones anuales mundiales de gases de efecto invernadero para e año 2020, y las trayectorias de las emisiones agregadas que serían compatibles con las perspectiva de mantener el aumento de la temperatura media mundial muy por debajo de 2 ºC respecto a los niveles preindustriales, y de proseguir los esfuerzos para limitar el aumento de la temperatura a 1,5 ºC con respecto a esos niveles;»
Además, las partes pusieron negro sobre blanco la importante preocupación y la necesidad urgente de resolver el problema del cambio climático, pero no tomaron ninguna decisión importante al respecto. Todo quedó para 12 meses después en Reino Unido.
«2. Toma nota del informe sobre la composición por sexos de las delegaciones de las Partes y de los órganos constituidos, que pone de relieve la persistente falta de progresos y la urgente necesidad de mejorar la representación de la mujer en las delegaciones de las Partes y en elos órganos constituidos;»
Aunque no ha cambiado el destino del planeta, la presidencia chilena, apoyada por Teresa Ribera, incluyó en la declaración final de Madrid la escasa presencia de mujeres en este tipo de eventos. «Son declaraciones políticas», recuerda García.
A pesar de tomar nota de ello, la presencia de mujeres no ha aumentado. El porcentaje en las últimas COP ha sido 68% hombres y 32% mujeres, como ha acontecido en la de Dubái que se celebra estos días en Emiratos Árabes Unidos.
COP 26
Escocia | 2021
Un año después de lo previsto, debido a la pandemia de Covid-19, Reino Unido acogió la COP26 en Escocia. Una cumbre que empezó con muchas expectativas, pero a medida que pasaban los días las presiones hacia la presidencia, ostentada por Kwasi Kwartengcomo.
«16. Reconoce que los efectos del cambio climático con un aumento de la temperatura de 1,5 ºC serán mucho menores que los derivados de un aumento de 2 ºC y resuelve proseguir los esfuerzos para limitar el aumento de la temperatura a 1,5 ºC;»
La adaptación es lo que más ocupó las páginas del texto de Glasgow y en estas mismas se reconocieron que los efectos del cambio climático serían mucho menores con la limitación del calentamiento global a los 1,5 grados.
«9. Expresa alarma y la máxima preocupación ante el hecho de que las actividades humanas hayan causado hasta la fecha un calentamiento global de alrededor de 1,1 ºC y que las consecuencias de ello se hagan sentir ya en cada región;»
«10. Observa con preocupación que el actual aporte de financiación para el clima destinada a la adaptación sigue siendo insuficiente para responder al empeoramiento de los efectos del cambio climático en las Partes que son países en desarrollo;»
Sin embargo, el gran logro es la incorporación de la palabra «combustibles fósiles» a una declaración final de una cumbre del clima. Fue la primera vez que se logró, pero el lenguaje utilizado no implica ninguna decisión que implique su abandono. «Exhorta a las Partes a que aceleren el desarrollo (...) hacia sistemas energéticos con bajas emisiones», propone el texto de Glasgow. Una medida que fue duramente criticada por la sociedad civil debido a la tibieza del artículo.
«20. Exhorta a las Partes a que aceleren el desarrollo, despliegue y la difusión de tecnologías y la adopción de políticas para la transición hacia sistemas energéticos con bajas emisiones, entre otras cosas incrementando rápidamente la generación de energía limpia y el despliegue de medidas de aficiencia energética, lo que incluye la aceleración de los esfuerzos para la reducción gradual de la energía del carbón generada sin medidas de mitigación y la eliminación gradual de las subvenciones ineficientes a los combustibles fósiles, prestando al mismo tiempo un apoyo específico a los más pobres y vulnerables, con arreglo a las circunstacias nacionales, y reconociendo que se necesita apoyo para lograr una transición justa;»
Además, por primera vez, se pide a las naciones que eliminen gradualmente la energía a base de carbón y los subsidios ineficientes a los combustibles fósiles. Es en esta cumbre cuando el término ineficientes apareció y sigue siendo objeto de discusión en las posteriores cumbres del clima como la que se celebra en Dubái. «Parece un término completamente inocente, pero abre la puerta a la captura de derechos de carbono para seguir quemando combustibles fósiles», advierte García. «Cada palabra cuenta», añade.
COP 27
Egipto | 2022
Es el último texto aprobado de cierre en una Conferencia de las Partes, a la espera de la de este ejercicio. La cumbre de Egipto estuvo, en varias ocasiones, a punto de venirse abajo por la lentitud de la presidencia y, sobre todo, por la falta de ambición.
«1. Reconocen la necesidad urgente e inmediata de contar con recursos financieros nuevos, adicionales, predecibles y en cantidad adecuada para prestar asistencia a los países en desarrollo que son especialmente vulnerables a los efectos adversos del cambio climático, de modo que puedan dar respuesta a las pérdidas y los daños económicos y no económicos relacionados con los efectos adversos del cambio climático, incluidos los fenómenos meteorológicos extremos y los fenómenos de evolución lenta, especialmente en el contexto de las acciones en curso y a posteriori (incluidas la rehabilitación, la recuperación y la reconstrucción);»
Tan lenta fue la propuesta que en muchas partes de la decisión final, el texto es copiado y pegado de la COP26. Así sucede en el texto sobre los combustibles fósiles.
«16. Exhorta a las Partes a que aceleren el desarrollo, el despliegue y la difusión de texnologías y la adopción de políticas para la transición hacia sistemas energéticos con bajas emisiones, entre otras cosas incrementando rápidamente la generación de energía limpia y el despliegue de medidas de eficiencia energética, lo que incluye la aceleración de los esfuerzos para la reducción gradual de la energía del carbón generada sin medidas de mitigación y la eliminación gradual de las subvenciones ineficientes a los combustibles fósiles, prestando al mismo tiempo un apoyo específico a los más pobres y vulnerables, con arreglo a las circunstacias nacionales, y reconociendo que se necesita apoyo para lograr una transición justa;»
No obstante, el gran recuerdo de la COP27 está en la consecución por primera vez de un Fondo de Pérdidas y Daños para los países más vulnerables. Una aceptación «acogida con beneplácito» por la presidencia y que, ya en Dubái, se ha operativizado con cerca de 700 millones de euros, eso sí solo el 0,2% de lo que necesitan los países del sur global para paliar los años del cambio climático.
«27. Acoge con beneplácito que, por primera vez, se hayan debatido las cuestiones relativas a los arreglos de financiación para dar respuesta a las pérdidas y los daños relacionados con los efcetos adversos del cambio climático, con énfasis en afrontar las pérdidas y los daños, en el marco de la Conferencia de las Partes y de la Conferencia de las Partes en calidad de reunión de las Partes en el Acuerdo de París, y acoge con beneplácito también la adopción de las decisiones 2/CP.27 y 2/CMA.4, sobre las cuestiones relativas a los arreglos de financiación para dar respuesta a las pérdidas y los daños relacionados con los efectos adversos del cambio climático;»
«Cada año las negociaciones son más complicadas», señala García. «Mientras el lenguaje sea más amplio y más general, más acuerdo. Esta es la clave», apunta.
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