Menos ricos para tributar
La disminución de las fortunas con la crisis afectará a los ingresos por el Impuesto de Patrimonio
Los números son tozudos y echan por tierra el dicho popular de «la crisis no afecta a los ricos», muchos de los cuales estarán más de acuerdo con esa otra frase de «cualquier tiempo pasado fue mejor». La situación económica se deja notar en diferentes esferas y los bolsillos de los más pudientes tampoco escapan a los latigazos de la crisis. Un hecho que puede echar por tierra los cálculos del Ministerio de Hacienda sobre lo que prevé recaudar con el recuperado y renovado Impuesto sobre el Patrimonio. Sin tener en cuenta las maniobras que las fortunas puedan hacer hasta el 31 de diciembre para tratar de eludir tener que rendir cuentas ante el fisco, lo cierto es que ya nada es como antes de que en 2008 el mismo Gobierno de Zapatero decidiera suprimir el ahora tan criticado y cuestionado tributo.
Basta con echar un vistazo a los números de la Agencia Tributaria y del propio Ministerio de Hacienda para comprobar que cualquier cálculo en base a los datos de 2007 —los últimos que tributaron por este concepto— pueden estar a un abismo de la realidad actual. El selecto grupo de los más acaudalados pierde componentes y las cuentas del Ejecutivo central para recaudar 1.080 millones de euros a través de las declaraciones de la Renta de los dos próximos años pueden quedarse en el cuento de la lechera.
En Castilla y León, con la subida del techo hasta 700.000 euros para pasar por caja —frente a los 108.000 de antes— deja en poco más de 8.300 las personas que supuestamente pagarán el Impuesto de Patrimonio. Esto se traduce en que las arcas públicas «engordarán» en unos 42,2 millones de euros. Son 40 menos que los casi 83 recaudados en 2008 y que la Comunidad seguía ingresando a través del modelo de financiación, una compensación que la Junta exige y que según la ministra de Hacienda, Elena Salgado, contradiciendo al ministro portavoz, José Blanco, seguirá vigente.
Son las cábalas si se tienen en cuenta las estadísticas que manejan los técnicos del Ministerio en base a 2007, por las que Cataluña es la Comunidad que más fortunas acumula (41.448), seguida de Madrid (27.629), que entre ambas suman la mitad de los 1.080 millones que se prevén recaudar.
Pero mucho ha cambiado el panorama desde entonces. Aunque en el rescatado tributo se tienen también en cuenta los bienes, posesiones y ahorros, la bajada de los ingresos por rendimientos del trabajo también afecta a los futuros supuestos cotizantes. Y éstos han caído de manera notable. Sólo en un año, Castilla y León perdió 62 personas con ingresos anuales superiores a los 600.000 euros. De los 208 contabilizados por la Agencia Tributaria en 2008 a los 146 de 2009.
Entonces eran 2.682 los considerados «ricos», mientras que en 2007, antes de estallar la crisis, en pleno «boom» inmobiliario, era 3.410 los acaudalados que cobraban más de 150.000 euros. Y la Comunidad no es la única en la que se produce este fenómeno. El descenso en el número de ricos en 728 personas es similar al experimentado en el resto de las comunidades. Las peor paradas, Andalucía y de la Comunidad Valenciana, que vieron como caía el número de potentados en más de 3.300 y 3.600 personas, respectivamente.
Estos datos colocan a Castilla y León como la segunda comunidad con menor porcentaje de ricos por habitante (0,005%), solo superada por Extremadura (0,002) y empatada con Cantabria. Al frente de los más acaudalados, madrileños y catalanes
Más con menos
Otro de los datos que se pueden apreciar en el mismo informe es el del número de pobres que hay en Castilla y León. Según los datos publicados por la Agencia Tributaria, en 2009 se batió el record en número de personas con rentas inferiores a los 1.500 euros: 58.877 personas. Supera el anterior record, que estaba en los 58.778 de 2003, año en el que se empezó a registrar esta estadística. Sí que conviene señalar que, analizando los datos en función del censo de población de ambos periodos, el porcentaje de pobres por habitante de 2003 es levemente mayor. Al igual que en el caso de los ricos, éstos también han experimentado una curva en los últimos años, siendo en 2006 el momento en el que menos hubo: 48.137.
Por comunidades, Castilla y León es la séptima región con más pobres por habitante. La tabla estaría liderada por Extremadura. Madrid es la Comunidad con menos gente con escasos recursos por habitante. Al igual que en el caso de los ricos todas las regiones han experimentado un notable aumento en el número de los que menos tienen.
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