«Toledo ha comprado el palacio de congresos a muy buen precio»
El arquitecto Rafael Moneo dice que el edificio estará abierto antes del 21 de junio

TOLEDO
Enésima visita, ayer, del arquitecto Rafael Moneo a uno de sus proyectos aún inacabado, el palacio de congresos de Toledo. Esta vez, de la mano del concejal de la Vivienda del Ayuntamiento, Aurelio San Emeterio, para ver las obras del pequeño lucernario que se está construyendo en el paseo del Miradero para dar luz a una escalera que recorre cuatro plantas.
Sobre la apertura del edificio, que definió como «una gran cosa», Moneo dijo, con una voz tenue, que deberá estar abierto antes de que comience el verano, el 21 de junio. Reconoció que la construcción ha sido «premiosa», aunque explicó que «a veces el hacer las obras más lentamente, ajusta más lo que es la obra a las fuerzas de una economía y sospecho que algo así ha pasado con esta». «Ya se ve el fin de una obra que me resisto a pensar cuándo hemos comenzado», añadió antes de invitar a los toledanos a viajar en el pasado y recordar lo que había en ese lugar hace años. Calificó de «acierto» haber pensado que la ciudad podía enmendar y usar de mejor modo «un borde de muralla tan destacado e importante».
La fachada, en la calle de Gerardo Lobo, no está tampoco terminada y el arquitecto espera cubrir el frente con algo que «lo anime cromáticamente, con algún elemento ornamental que diga lo que es este edificio», algo que «no será una cosa costosa, pero sí tiene que ser muy vistosa».
Dos millones más
En el plano económico, Moneo defendió su proyecto, levantado en un emplazamiento muy complejo —cinco plantas de aparcamiento en roca— y en el que se han invertido ya unos 50 millones de euros. «La ciudad está comprando este palacio de congresos a muy buen precio», si se compara, aclaró, con otros proyectos suyos similares. Puso como ejemplo el palacio de congresos de Vitoria, donde se van a invertir tres veces más.
Al tiempo que Moneo hablaba de este capítulo, el alcalde de Toledo, Emiliano García-Page, afirmaba que el palacio de congresos tendrá un coste de dos millones de euros más de lo previsto. «Algunos lo han vendido, pero quienes lo vamos a pagar seremos nosotros», añadió, ya que los fondos de las obras hasta ahora «han sido aportados» por la Diputación Provincial de Toledo y la Junta de Comunidades. Lo dijo durante el balance de su gestión al frente del Ayuntamiento en el año que hoy acaba. Y lamentó los «excesos» de anteriores equipos de Gobierno (refiriéndose a José Manuel Molina, del PP). A modo de ejemplo, García-Page afirmó que la desviación en dos millones de euros del presupuesto ha sido más dinero que el que se ha empleado en «darle dos vueltas» al conjunto de red viaria mobiliaria, estética y funcional de la ciudad.
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete