La despoblación y la emigración a las zonas urbanas ha dejado un rastro de aldeas vacías en la Comunidad gallega que ahora esperan una nueva oportunidad. Más de una veintena, según recoge el portal web www.aldeasabandonadas.com, permanecen ancladas en el tiempo a espera de un comprador que las restaure y les devuelva la vida. Los últimos en hacerse con una de estas aldeas deshabitadas, explican a ABC los gestores de la web, «fueron unos ingleses que hace unos días compraron un precioso conjunto de 4 casas y hórreo enclavado en una zona privilegiada en el valle del Eo, una zona protegida por la Unesco». La propiedad cuenta con acceso asfaltado, agua propia de fuente y manantial, bosque de 7.000 metros cuadrados de pinos, eucalipto y castaños, y área para jardines y cultivo. Cada una de las cuatro casas que la componen cuenta con su propio título de propiedad, «y se encuentran con toda la documentación en regla incluyendo catastro y registro».
Los clientes extranjeros compran la mitad de las aldeas en venta
Entre las aldeas de las que a día de hoy cuelga el cartel de «se vende» destacan las once ubicadas en Lugo, la provincia gallega que más casas deshabitadas suma. En plena Ribeira Sacra, y por 60.000 euros, los interesados pueden adquirir una aldea compuesta por cinco casas que todavía conservan sus corrales y sus leñeras. Más cara es la opción «Un balcón frente al mar», una aldea compuesta por cuatro casas individuales ubicadas frente al mar con magnífica panorámica a la Costa da Morte en plena provincia de La Coruña. Su precio de venta es de 370.000 euros.






