El catalán deja de ser «lengua propia» en Aragón

La vida de esta norma, sin embargo, ha sido corta. En ella, además, se aprobó la creación de la Academia Aragonesa de la Lengua Catalana, que no llegó a entrar en funcionamiento. También este órgano queda definitivamente derogado.

La ley que mañana aprobarán las Cortes regionales no hace mención alguna al catalán, cuestión espinosa en Aragón ante las connotaciones políticas que conlleva. Desde hace años, diversos colectivos aragoneses vienen denunciando la insistencia del nacionalismo catalán por apropiarse como territorio histórico la zona oriental de esta región, precisamente bajo el argumento de que es catalán lo que allí se habla.

PP y PAR, que gobiernan en coalición en Aragón desde julio de 2011, tuvieron claro desde el primer momento que iban a derogar esa ley. Los dos se opusieron al texto que sacó adelante el PSOE de Marcelino Iglesias, que por entonces era coaligado al PAR.

Populares y aragonesistas han elaborado una nueva ley en la que el catalán no es citado como tal. Para evitar tentaciones del nacionalismo catalán, evitan que la lengua dé pie a reivindicaciones territoriales. La nueva ley habla de «modalidades lingüísticas» propias de Aragón: la «lengua aragonesa propia de las áreas pirenaica y prepirenaica de la Comunidad Autónoma, con sus modalidades lingüísticas»; y la «lengua aragonesa propia del área oriental de la Comunidad Autónoma, con sus modalidades lingüísticas».

PSOE, CHA e IU se han mostrado en contra de este texto, pero no suman mayoría absoluta en las Cortes de Aragón, así que no podrán evitar que mañana quede definitivamente aprobado y que entre en vigor.

Desde Cataluña, los partidos nacionalistas han reaccionado con duras críticas. Desde la coalición CiU, el secretario general de Convergencia de Cataluña, Josep Rull, llegó a calificar la nueva Ley de Lenguas de Aragón como una «agresión a la unidad de la lengua catalana». Y anunció que, ante hechos así, su «combate será una prioridad».

Desde la independentista Esquerra Republicana de Cataluña (ERC), su portavoz adjunto, Oriol Amorós, ha indicado que la nueva ley que va a entrar en vigor en Aragón «es mala fe» y que supone «denigrar la lengua catalana». ERC considera las comarcas orientales de Aragón como parte de los «Países Catalanes».

También el PSC ha reaccionado contra la nueva ley aragonesa que, según el portavoz Maurici Lucena, «obedece a motivos políticos».