La ofensiva de la izquierda por el aborto llega al Congreso de los Diputados

Así, el PSOE va aprovechar la primera sesión de control al Gobierno de 2014 para pedir explicaciones a varios de sus miembros por la reforma de la Ley del Aborto. Una de las interpeladas será la vicepresidenta del Ejecutivo, Soraya Sáenz de Santamaría, a quién se le instará a explicar por qué nadie del Gobierno ha querido comparecer en la Cámara Baja para dar cuenta del anteproyecto que pasó por el Consejo de Ministros hace casi un mes.

Otra vez Soraya contra Soraya

La encargada de interrogar hoy a la número dos del Ejecutivo será, como es habitual, la portavoz del Grupo Socialista, Soraya Rodríguez. «¿Por qué ningún miembro del Gobierno está dispuesto a comparecer en el Parlamento para explicar el anteproyecto de ley sobre interrupción voluntaria del embarazo?», reza la pregunta registrada este pasado jueves, a la que tuvo acceso Europa Press.

Rodríguez se hace así eco de las votaciones llevadas a cabo el martes en la Diputación Permanente, donde el PP rechazó una por una todas las peticiones de comparecencia pedidas por la oposición en relación con la nueva regulación (hasta ocho peticiones), que afectaban a la vicepresidenta y a los ministros de Justicia, Alberto Ruiz Gallardón, y a la de Sanidad y Servicios Sociales, Ana Mato.

Antes que la portavoz, el líder del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba, estrenará el año debatiendo con el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, sobre asuntos sanitarios, lo que le dará pie para pedirle cuentas también por la nueva legislación sobre el aborto que ha sido cuestionada incluso dentro del PP. En concreto, Rubalcaba retará a Rajoy a explicar si su Gobierno «garantiza el derecho a la protección de la salud de los ciudadanos».

También se centrará en el aborto la vicesecretaria general del PSOE, Elena Valenciano, quien volverá a interrogar sobre este asunto al ministro de Justicia, Alberto Ruiz-Gallardón: «¿Considera que se respeta la libertad de las mujeres obligándolas a ser madres?», es la cuestión que tendrá que responder el padre del anteproyecto.

Desde el BNG, su portavoz en la materia, Olaia Fernández Davila, ha registrado una pregunta dirigida en principio al presidente del Gobierno en la que le cuestiona sobre el «malestar social» generado por el citado anteproyecto de ley. «¿Va el Gobierno a retirar la propuesta de reforma de la legislación en materia de aborto?», preguntará la nacionalista gallega, si bien aún está por confirmar quién del Gobierno será el que responda a la pregunta.

Además, el PSOE ha presentado otra cuestión sobre este asunto para la ministra de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, a la que la portavoz de Igualdad del PSOE, Carmen Montón, preguntará directamente «qué responsabilidad tiene» la encargada de las políticas de igualdad «en las decisiones del Gobierno que amenazan los derechos de las mujeres».

Mato tendrá que hacer frente a otra pregunta del PSOE sobre los copagos sanitarios. El portavoz de Sanidad del Grupo Socialista, Pepe Martínez Olmos, le invitará a aclarar si está «satisfecha de los copagos aplicados por el Gobierno en la sanidad pública». Y lo hará después de que su departamento haya anunciado que finalmente no serán efectivos los que iban a afectar al transporte sanitario no urgente -cuestionado por el Consejo de Estado-, así como los aplicados a productos ortoprotésicos y a los dietoterápicos.

Finalmente, será la Izquierda Plural (IU-ICV-CHA) la que formulará una interpelación al Gobierno sobre su política en materia de salud sexual y reproductiva e interrupción voluntaria del embarazo, ante el nuevo anteproyecto de ley por el que va a reformar la vigente normativa de 2010.

Falta por conocer quién será el responsable del Gobierno en responder a esta cuestión, decisión que comunicará el Ejecutivo la próxima semana. Y toda interpelación provoca en la siguiente sesión plenaria el debate de su consecuente moción. En este caso y, dado que es un Pleno del Congreso extraordinario, ya que enero no es un mes hábil, esta iniciativa se debatirá y votará previsiblemente el martes 11 de febrero.

A diferencia de lo que ocurrirá en su momento con la ley, en estas votaciones de textos de control al Gobierno, los grupos parlamentarios tienen la potestad de solicitar el voto secreto en la Cámara Baja. Podría ser ésa la intención de la Izquierda Plural dadas las disensiones avistadas en el Grupo Popular frente a esta nueva regulación y que podrían impedir a más de uno dar su voto en contra a esta reforma del Gobierno, aunque de forma secreta.

Dentro de esta ofensiva parlamentaria de los grupos de la oposición estarían pendientes de debate y votación, aunque ya más entrado el curso parlamentario, sendas proposiciones no de ley presentadas tanto por el PSOE como IU-ICV-CHA, en las que exigen al Gobierno la retirada del anteproyecto de Ley de protección de los derechos del concebido y no nacido y de la mujer embarazada.