La reforma «federal» de Rubalcaba y la tensión territorial agrietan el PSOE
Corcuera reaparece para lamentar la deriva del partido con ese «invento», mientras Ferraz le recuerda que el federalismo está en el «alma» socialista
Si algo ha demostrado la Declaración socialista de Granada de julio pasado es que a pesar de que se presentó como propuesta territorial unitaria, no ha logrado cerrar la «discrepancia» sobre el derecho a decidir . Lo que el PSOE y Alfredo Pérez Rubalcaba definieron entonces como punto de llegada en el debate socialista, el PSC inmediatamente aclaró que solo es un punto de salida. Y así se ha escenificado en los dos meses transcurridos. Por eso, basta una simple chispa -el debate organizado ayer por «El Confidencial» sobre el futuro de socialismo- para que se incendie el patio socialista. Los protagonistas eran Pere Navarro y Manuel Chaves, pero lo más sustancioso se produjo cuando un José Luis Corcuera presente entre el público pidió la palabra para preguntarse en alto hacia dónde va el PSOE y si es «consciente» de lo que significa España. «Pocas bromas», advirtió.
Corcuera dijo en alto lo que muchos secretarios generales de federación piensan: que la reforma «federal» de la Constitución planteada por Rubalcaba es un «invento» del PSOE «para resolver un problema que nosotros no hemos creado», en referencia a CiU y ERC. «Corcuera ha dicho algo que es verdad. Estamos todos embarcados en esto por las estrategias electorales de otros, es decir, de Navarro y el PSC », decía horas después a ABC un importante barón socialista, partidario de marcar distancias. «Corcuera piensa que nos hemos vuelto locos; lo que pasa que hasta hoy solo lo decía en privado», añadía.
La gota que colmó el vaso de la paciencia del exministro, y que ha generado amplia confusión en muchos cuadros del partido, fue que la vicesecretaria general, Elena Valenciano , antepusiera el lunes la posibilidad de debatir sobre autodeterminación en una hipotética reforma constitucional al contundente rechazo al mismo.
Manuel Chaves y Pere Navarro enseguida salieron al quite de lo dicho por Corcuera. El expresidente del PSOE recordó a su «amigo» que el partido es «federal» y que la reforma de la Carta Magna es necesaria para hacer posible el entendimiento con Cataluña en esta difícil hora.
«Hay que leer más»
Pero ya no había marcha atrás y las palabras de Corcuera ante un foro en el que había numerosos dirigentes del PSOE atónitos -el expresidente de la Generalitat José Montilla, Soraya Rodríguez, Juan Moscoso, José Andrés Torres Mora o María González Veracruz - generaron debate por sí mismas. Desde el Congreso, la diputada del PSC Teresa Cunillera respondió al exministro socialista que «hay que leer más» y no decir que el federalismo es una palabra inventada. «Si se lee un poco se sabe de todo», advirtió.
Por su parte, el diputado del PSOE y exalcalde de San Sebastián Odón Elorza manifestó que no comparte «en absoluto» las palabras de José Luis Corcuera . Más diplomática, en línea con lo expresado por Chaves, que ya había dicho que lo federal está en «el alma» del partido, la portavoz del Grupo Socialista, Soraya Rodríguez recordó al extitular de la cartera de Interior en los gobiernos de Felipe González que milita en un partido de «larga tradición federal» y cuyos órganos se denominan a sí mismos federales.
Valeriano Gómez recordó que el Estado federal es un modelo que existe en países con una «amplia tradición democrática» , como Estados Unidos, Canadá y República Federal de Alemania. «Es inútil a estas alturas de la historia democrática de nuestras sociedades discutir sobre este asunto. El Estado federal es perfectamente posible y garantiza la cohesión».
Los socialistas creen que al Gobierno de Mariano Rajoy no le va a quedar mas remedio de ceder en una reforma constitucional que dé una salida a la cuestión catalana sin más demora.
Línea impuesta por el PSC
La posición del PSC y de su primer secretario, Pere Navarro — defensa del «derecho a decidir» de los catalanes... pero para votar «no» a la independencia— es lo que más quebraderos de cabeza le está produciendo a Alfredo Pérez Rubalcaba. No solo porque al PSOE le parezca mal romper la soberanía nacional, sino porque las bases entienden que se está haciendo el «caldo gordo» a los nacionalistas. Y esa es una postura, coinciden numerosos barones, que está menguando las posibilidades electorales socialistas en el resto del país. Ayer, durante el debate que mantuvo en Madrid con el expresidente del PSOE Manuel Chaves, Navarro explicó que la clave del problema es «emocional», de una ciudadanía catalana que se siente maltratada por el resto de España y, por tanto, ya no es tiempo de componendas de las élites políticas.
La prueba es que no quiso aclarar si el PSC se sumará al Pacto nacional por el Derecho a Decidir. «Defendemos la consulta como elemento de regeneración democrática, el derecho de los ciudadanos a ser consultados sobre su futuro», insistió, mientras Chaves se limitó a reconocer su «discrepancia» y la del PSOE , y a hacer un canto a la unidad de ambos partidos, que ha producido 35 años de estabilidad entre Cataluña y el resto de España.
Una propuesta alternativa
El expresidente del PSOE y exvicepresidente Territorial de los gobiernos de Zapatero, Manuel Chaves, aprovechó su intervención inicial en el debate para lanzar una propuesta: que la futura Constitución reconozca la «singularidad fiscal» de Cataluña, como ya lo hace la actual con los Conciertos Vasco y Navarro, y el Régimen Especial Fiscal (REF) canario. Si queremos dar un impulso «es necesario hacer una apuesta en la Constitución por el federalismo fiscal» , aunque eso «levante ronchas» en otras zonas.
Chaves destacó que «nadie puede dudar de que en Cataluña existe un camino abierto hacia la independencia» y ha apostado por que la necesaria respuesta sea un nuevo pacto territorial, con todas las dificultades que puede entrañar encontrar el consenso. El expresidente del PSOE cree necesario «un nuevo pacto constitucional que integre un pacto territorial que afronte el desgaste del Estado autonómico y de respuesta al aventurerismo independentista». Reconoció que su propuesta es un Estado autonómico asimétrico», pero ha remarcado que el actual Estado ya lo es. «Nadie se tiene que sorprender de la asimetría, vivimos en un Estado asimétrico». Su apuesta es el federalismo fiscal como existe en Alemania y buscando fórmulas que «equilibren el principio de ordinalidad» en la financiación establecida en el Estatut y compatible con la solidaridad.
«Aparato» oficial del PSOE
Alfredo Pérez Rubalcaba sabe que una fuerte caída electoral en Cataluña alejaría al PSOE de La Moncloa por muchos años y ha supeditado toda su estrategia a que la «discrepancia» con el PSC en este escenario de tensión no le obligue a romper. Por eso, en su reforma constitucional «cabe debatir todo», incluido un «derecho de autodeterminación» que el Grupo Socialista rechaza, según se encargaron de matizar el lunes la vicesecretaria general, Elena Valenciano, y ayer Manuel Chaves.
Esa renuncia del PSOE a fijar «líneas rojas» está levantando críticas en el resto de federaciones y en personalidades, como demostró ayer el exministro José Luis Corcuera, porque ven exceso de complacencia con unas tesis que rompen con la tradición socialista.
Por contra, la Ejecutiva replica que el PSOE tiene un alma «federal» -así se llaman todos sus órganos- y por tanto a Corcuera no le debería extrañar que su partido proponga una reforma constitucional en ese sentido, replicó la portavoz del Grupo Soraya Rodríguez. Más alla de esto, Valenciano explicó el lunes que impedir esa discusión es poner puertas al campo porque el debate «está en la calle» y hay que «escuchar» a los participantes en la Diada.
La «vieja guardia» socialista
Ya había avisado Felipe González, máximo exponente de la «vieja guardia», que a ese sector del partido no le gustan nada los derroteros que están tomando los acontecimientos. «Yo quiero decidir sobre Cataluña» , repite el expresidente con frecuencia. Ayer, el exministro José Luis Corcuera pidió la palabra en un debate entre Navarro y Chaves para advertir de que «sería conveniente que el PSOE tuviera clarísima la idea de que es el Estado español, ningún subterfugio, ni bromas»
«¿Qué es eso del derecho a decidir? ¿Quiere eso decir que desde ese momento cualquier comunidad puede decidir? ¿Decidir qué? Vamos a decir la verdad». Corcuera recordó que a quienes atentaban contra la Constitución desde la derecha se les llamaba «fascistas», y se preguntó si a los que la atacan desde la izquierda hay que considerarlos demócratas.
«Y al tío que se quiera cargar la Constitución porque dice que hará una consulta lo diga o no la Constitución, ¿cómo lo llamamos? ¿demócrata de toda la vida?» , añadió en alusión a Artur Mas. «Mientras no se diga qué artículos se quieren cambiar, ‘federal’ será sólo una palabra inventada para salir de un atolladero que no hemos creado creado nosotros», recalcó Corcuera.
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