El Gobierno vasco vuelve a equiparar a las víctimas de ETA con sus asesinos

Un informe encargado por el Gobierno Vasco cifra en 1.004 las muertes «por vulneraciones de derechos humanos relacionadas con el caso vasco»

s.e.

14/06/2013
Actualizado a las 17:27h.

El Gobierno vasco, presidido por Íñigo Urkullu, ha recuperado el lenguaje tradicional del PNV para, entre otras cosas, equiparar una vez más a las víctimas del terrorismo de ETA con los muertos de la banda criminal a manos de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad ... del Estado. La clásica equidistancia del PNV, interpretada siempre por las víctimas como una ofensa y una humillación para las más de 800 personas asesinadas por la banda criminal, se ha puesto de manifiesto esta vez en un informe encargado por el Gobierno vasco que cifra en 1.004 las personas muertas por vulneraciones de derechos humanos relacionadas con lo que se califica como el «caso vasco». De ellas, 94 corresponderían a las Fuerzas de Seguridad del Estado (FSE), 837 a ETA y 73 a grupos parapoliciales y de extrema derecha.

Urkullu ha presentado junto al obispo emérito de San Sebastián, Juan María Uriarte , el «Informe de Vulneración de Derechos Humanos en el Caso Vasco», que recoge atentados cometidos por ETA , el GAL y otras organizaciones terroristas, así como abusos cometidos por las fuerzas policiales entre 1960 y 2013, aunque tratando de evitar siempre las «equiparaciones» entre unos y otros casos.

El documento, que forma parte del Plan de Paz y Convivencia del Gobierno vasco, ha sido elaborado por el propio Uriarte; el exdirector de Derechos Humanos del gabinete de Juan José Ibarretxe, Jon Mirena Landa , la jueza Manuela Carmena y el profesor de Derecho y exconcejal del PP Ramón Múgica .

Además de las 1.004 muertes que recoge el informe, el número de heridos se cifra en 3.772. En el caso de las conculcaciones de derechos humanos atribuidas a las Fuerzas de Seguridad del Estado (FSE), se indica que estos comportamientos han causado 94 muertes, nueve de ellas bajo custodia policial, veinte en controles policiales o situaciones similares y 17 por «confusiones, errores, abusos u otros». El estudio señala que los abusos policiales han provocado 746 heridos en el periodo analizado. El estudio diferencia entre varias etapas.

En el caso de ETA, a los 837 asesinatos de la banda se añaden entre 2.365 y 2.600 heridos , mientras que a los grupos parapoliciales y de extrema derecha, como el GAL o el Batallón Vasco Español, se les atribuyen 73 asesinatos y 426 personas heridas.

El documento, en su capítulo de recomendaciones, constata la «penuria de datos y la abundancia de casos no investigados», por lo que propone adoptar medidas para «clarificar» los crímenes de ETA no esclarecidos y para determinar la «realidad y extensión» de la extorsión económica -el llamado «impuesto revolucionario»- de la organización terrorista, así como el número de personas que abandonó el País Vasco por la amenaza de ETA.

Urkullu ha afirmado que el informe contiene «datos objetivos» que reflejan «la verdad de lo ocurrido». «Los datos informan, no pueden hacer daño, el daño lo puede hacer una interpretación de los mismos que no atienda a los principios éticos», ha manifestado.