Los acreedores de Marsans piden 21 años de cárcel para Díaz Ferrán y 23 a De Cabo

El escrito, formulado por los abogados Daniel Jiménez y Margarita Santana, solicita una pena ligeramente superior, 23 años de cárcel, para el liquidador del grupo Marsans, Ángel de Cabo, el encargado del vaciamiento patrimonial de las empresas y bienes personales de Díaz Ferrán y su socio, Gonzalo Pascual, ya fallecido. El número dos del liquidador valenciano, Iván Losada, se enfrenta a 20 años de prisión, mientras que para Gerardo Díaz Santamaría, hijo del expresidente de la CEOE, solicitan quince años de cárcel.

El escrito, de 94 páginas, presenta una novedad importante: los acreedores de Marsans apuntan hacia la responsabilidad del Banco Sabadell y del fabricante de aviones Airbus. A la entidad financiera le solicitan que devuelva nueve millones de euros por haber colaborado con Díaz Ferrán en la venta de dos lujosos apartamento en Nueva York. Según fuentes de la acusación, el banco habría permitido al empresario la transacción de los inmuebles -hipotecados- cuando ya estaba declarado en situación concursal. Díaz Ferrán obtuvo de la venta 9,3 millones de dólares (6,7 millones de euros) y otros 5,8 (4,2 millones de euros) para la entidad financiera.

En cuanto a Airbus, los acreedores de Marsans comunican al juez que el fabricante aeronáutico debe devolver 91 millones de dólares (66 millones de euros). El motivo es que cuando Marsans está a apunto de quebrar, ya en manos de Ángel de Cabo, el grupo turístico tenía encargado un importante pedido de aviones, de los que ya había pagado 124 millones de dólares. De Cabo negoció con Airbus romper ese contrato a cambio de 34 millones de dólares, por lo que, según la acusación particular, la firma estadounidense se ahorró la devolución de 91 millones de dólares.