Fomento aprobará bonificaciones de hasta el 50% en las tasas aéreas

La «mano derecha» de Pastor, el secretario de Estado de Infraestructuras, Rafael Catalá , fue el primero en anunciar, en la comisión de Fomento de la Cámara Baja, que el Ejecutivo estaba dispuesto a aceptar descuentos en las tasas que las aerolíneas deben abonar por operar en los aeropuertos españoles y que, posteriormente, repercuten en el precio de los billetes. Fue el pasado jueves cuando a las patronales de las aerolíneas se les notificó el contenido de dichas propuestas de estímulo, que incluirán bonificaciones de entre el 25% y el 50% en la tasa de pasajeros y cuyo porcentaje se vinculará al incremento del número de usuarios que sean capaces de generar estas compañías, según apuntan fuentes empresariales y de la sociedad pública.

Al no haberse incluido esta propuesta en los Presupuestos Generales del año que viene, el Partido Popular deberá presentar una enmienda en el proyecto de ley, que actualmente se debate en el Congreso de los Diputados. Los grupos parlamentarios disponen de plazo hasta el próximo día 25 de este mes para presentar enmiendas al articulado.

En el plano empresarial, esta medida, que liga las rebajas en las tarifas al aumento de la actividad, parece tener la clara finalidad de reconocer la gestión de compañías como Vueling o Air Europa, que con la apertura de nuevas rutas y frecuencias han aumentado el uso de las infraestructuras españolas. Por el contrario, se penaliza la decisión de recortar capacidad, como Iberia, inmersa en un plan de reestructuración que ha supuesto un tijeretazo en la capacidad del 15%, con la consiguiente fuga de pasajeros. AENA calcula que el descenso de Iberia ha supuesto la pérdida de tres millones de viajeros durante el último año para el aeródromo madrileño.

Precisamente, con este plan de bonificaciones, el Gobierno responde a una de las principales reclamaciones de las regiones afectadas, como la Comunidad y el Ayuntamiento de Madrid. L a propia regidora de la capital, Ana Botella, subrayó esta semana la necesidad de rebajar las tasas aeroportuarias para que «puedan ser competitivas» y logren atraer a las compañías de bajo coste. En términos parecidos también se expresó el presidente de la Comunidad de Madrid, Ignacio González.

Impulso para Barajas

La ausencia de un operador de referencia «low cost» en el «hub» madrileño para alimentar el corto y medio radio , como es el caso de Vueling en El Prat, es uno de los motivos que explican la caída de tráfico en Barajas, aparte del fuerte ajuste de Iberia y el desplome de la demanda nacional. Sin embargo, e l presidente de AENA, José Manuel Vargas, ha rechazado de plano la posibilidad de que, como esgrimen las autoridades madrileñas, el descenso del tráfico del aeropuerto madrileño tenga relación con el incremento de las tarifas aeroportuarias que se adoptó en 2012.

Apunta, para ilustrar este argumento, que las tarifas de Barajas y El Prat han repuntado de manera similar y que esto no se ha traducido en una evolución del número de pasajeros a la par. Vargas recalcó, públicamente, que existen otros factores que influyen en mayor medida en el tráfico de viajeros de la red de aeropuertos, como la colaboración entre las instituciones locales y las aerolíneas. Y puso como máximo referente al aeropuerto de la Ciudad Condal. « El Prat es un modelo de cómo se trabaja en promoción de un aeropuerto, con una aerolínea eficiente en costes y con una gran promoción del destino», destacó el máximo responsable del gestor aeroportuario, quien reclamó «más involucración en Madrid».

En este sentido, tanto Vargas como Pastor han hecho hincapié en que, pese a la última subida de las tasas, los costes de escala que presentan los aeropuertos españoles, y en especial los de Barajas, resultan más competitivos que los de sus competidores internacionales. Según los datos ofrecidos por AENA, a un avión que opere un vuelo europeo le cuesta 3.119 euros realizar escala en Barajas, mientras que debe desembolsar 10.836 en Heathrow (Londres) o 4.432 en Fráncfort (Alemania). En el caso de las conexiones de largo radio, la diferencia se dispara: si en Heathrow cobran 63.649 euros por avión, el madrileño exige casi seis veces menos (11.296 euros).

Además, tras el enfrentamiento entre las aerolíneas y el operador por el incremento tarifario, AENA firmó un acuerdo con las compañías para suavizar el aumento de las tarifas previstas para los próximos años, de manera que se actualizara durante el próximo año con un alza del IPC más 1 punto (frente a la posibilidad del IPC más cinco puntos que concede la legislación europea). El gestor cifra en 250 millones de euros el déficit de 2013 originado porque históricametne las inversiones han resultado superiores a los ingresos.