Zara y Mango: ¿Por qué la exitosa moda «low cost» española es más cara en el extranjero?

Ambas marcas cuentan, además, con embajadoras tan famosas como Catalina de Cambridge y su hermana Pippa Middleton, en la caso de Zara, o Doña Letizia y Kate Moss por Mango . Hasta «it girls» del momento, como Olivia Palermo, pasean con prendas de estas dos casas españolas.

Pero la ropa de estas firmas no cuesta lo mismo en todas las zonas geográficas, como podemos comprobar en su tienda online. El mismo vestido con apliques en los hombros de Zara se vende en España y Portugal por 25,95 euros, precio que asciende a los 29,95 euros en Francia, 25,99 libras en Reino Unido (aprox 32,5 euros), 1899 rublos en Rusia (unos 47 euros), o 359 yuan en China (44,2 euros).

En Mango , pasa exactamente lo mismo. El vestido peplum panel semitransparente puede conseguirse en España y Portugal por 29,99 euros, un precio más económico que los 34,95 euros que cuesta en Francia, las 34,99 libras de Reino Unido (43,7 euros), los 1999 rublos de Rusia (49,3 euros) o los 369 yuan de China (45,5 euros).

Si alguna vez te has preguntado el porqué de este diferencia de precios, aquí tenemos la respuesta que nos han dado sendas empresas. Desde Mango, aseguran a ABC.es que sus precios son más elevados fuera para «cubrir gastos de envío, aranceles, aduanas, transportes y algún gasto inherente a cada país».

Pero en Inditex van más allá y explican que, aunque se tienen en cuenta los costes de operación en cada país, éstos no son determinantes. « Fijamos los precios de forma independiente en cada mercado , de forma que en todos se mantenga un mismo posicionamiento comercial: productos con un componente alto de diseño y calidad que se ofrecen a los clientes a un precio atractivo. Éste puede ser diferente en cada mercado, en función de los niveles de precios de nuestro sector en él», explica a ABC.es una portavoz de la firma gallega.

Y, a pesar de la crisis, las cuentas les siguen saliendo. En 2011, las ventas de Inditex crecieron un 10% hasta llegar a los 13.793 millones de euros, y las de Mango un 11%, hasta alcanzar los 1.408 millones. Un 75% del volumen de negocio de la firma gallega (con 5.618 tiendas repartidas en los cinco contienentes ) corresponde a mercados extranjeros, cifra que asciende al 84% en el caso de la empresa fundada por Isak Andic , que está presente en 108 países y cuenta con 2.162 establecimientos.

Analizamos, a continuación, la percepción en cuatro países de nuestras marcas de moda «low cost» más reconocidas:

Dentro de las fronteras británicas, Zara constituye un símbolo de elegancia, refinamiento y gusto. La firma de Amancio Ortega se adhiere a un concepto de moda de gama alta, mejor considerada que en el territorio nacional español. Los precios resultan bastante asequibles al nivel de vida de los ingleses y en relación con la calidad y el diseño se presenta como una oferta muy atractiva, informa desde Londres Ana Mellado .

Las necesidades de la mujer cosmopolita británica encajan a la perfección en el departamento de Woman, el más admirado y sin duda, el más rentable en cada uno de sus establecimientos.

Prueba de la gran aceptación, Zara ha conquistado una de las zonas más exclusiva de Londres, que colinda con la Milla de Oro de Bond Street. El pasado mes de junio, el presidente del grupo Inditex, Pablo Isla, hacía pública la compra del edificio que acoge la tienda más emblemática de Zara en la capital británica, en la esquina de las calles Oxford y New Bond, por 155 millones de libras (más de 192 millones de euros).

El grupo dispone en la actualidad de 96 establecimientos en Reino Unido, englobando tanto a Zara como al resto de marcas (Massimo Dutti, Pull&Bear, Bershka y Zara Home).

Tras el grupo Inditex, Mango es la segunda cadena exportadora de textil español en Reino Unido. Desde 1998, cuando abrió su primer establecimiento, la cadena catalana ha mantenido un continuo proceso de crecimiento en el país, con la apertura de nuevas tiendas (ya alcanza las 70) y concesiones en los grandes almacenes House of Fraser. Mango ha encontrado en la modela británica Kate Moss a su musa perfecta para promocionar sus colecciones, sobre todo dentro de Reino Unido, donde su imagen ha dado un gran impulso a las ventas.

Los últimos en aterrizar en Londres son Bimba & Lola, El Ganso, Nanos, Party Fiesta y Amigos de Tierra que ya buscan su hueco entre el público británico.

Desde que Mango desembarcó en Rusia en 1999 su expansión no se ha detenido ni un momento. Actualmente tiene en el país eslavo más de un centenar de tiendas y su objetivo es llegar a las 200 en 2014. La firma catalana está presente incluso en el remoto Vladivostok , ciudad portuaria que se encuentra frente a las costas de Japón y a tiro de piedra de Corea, informa desde Moscú Rafael M. Mañueco .

Mango obtuvo en Rusia el año pasado una facturación de 64 millones de euros, siendo así su cuarto mayor mercado tras España, Francia y Turquía. En Moscú ha ocupado un segmento superior al logrado en España, lo que hace que sus precios sean algo más elevados.

Zara llegó a Rusia cuatro años más tarde, pero vende mucho más. Sus precios son también más caros que en España. Sin embargo, su producto se percibe como barato, pero muy actual . De ahí su enorme acogida entre los rusos y las rusas en todos sus formatos. La cadena de moda de Inditex tiene abiertos en Rusia más de 100 comercios y cada vez que aparece uno nuevo en otra ciudad del país triunfa de inmediato.

La imagen de Zara y Mango en Rusia es equivalente a otras prestigiosas marcas de moda como Benetton, Mexx o Massimo Dutti. Las dos marcas españolas tienen éxito fundamentalmente entre los jóvenes, muy orientados en Rusia hacia la moda. Consideran que la relación calidad precio de ambas es de las mejores.

La reciente apertura de la tienda «online» de Zara en China demuestra la importancia que este mercado, el más dinámico del mundo, tiene para el Grupo Inditex.

Desde que Zara abrió su primera tienda en Shanghái en 2006, se ha extendido a velocidad de vértigo por todo el país hasta contar con un centenar de establecimientos por 40 grandes ciudades como Pekín, Cantón (Guangzhou), Tianjin, Shenzhen, Chengdu o Chongqing, todas ellas con más de diez millones de habitantes. Contando otras marcas como Massimo Dutti, Pull & Bear, Bershka, Stradivarius y Oysho, Inditex dispone de unas 300 tiendas repartidas por toda China.

Para el público chino, sobre todo el femenino, Zara ofrece moda de alto diseño a precios razonables, aunque lo cierto es que sus prendas se venden en este país más caras que en España para situarse al mismo nivel que otros diseñadores de prestigio, informa Pablo M. Díez desde Pekín .

Por su parte, Mango es otra de las firmas textiles más populares en Asia y también en China, que el año pasado representó el 4 por ciento de su facturación (1.408 millones de euros) gracias a sus 187 tiendas. Para los próximos cinco años, el objetivo de la marca catalana es llegar al millar de establecimientos en el gigante oriental.

Junto a estos estandartes de la moda española, en China también operan con éxito tiendas de Adolfo Domínguez y Balenciaga.

Zara y Mango se han convertido en dos empresas emblemáticas, cuyas tiendas, boutiques y puntos de venta, en París, abren nuevos mercados, están en vanguardia de la creación y continúan conquistando nuevos públicos cosmopolitas, más allá de los mercados tradicionales, español o francés.

El último desfile de Mango se celebró en el Centro Pompidou, el museo más visitado del mundo, «navío almirante» de la más canónica creación contemporánea. A través de su veintena de puntos de venta parisinos, Mango continúa creciendo con su oferta internacional: la «marca España» está asociada a las figuras de la moda internacional, de Kate Moss a Laura Ponte , más un largo etcétera.

Con sus dos tiendas en los Campos Elíseos y su veintena en el resto de París, Zara y el grupo Inditex se han convertido en símbolos de la creación textil y empresarial sin fronteras, cuyos modelos originalmente gallegos han terminado en imponerse en cinco continentes, a través de varios millares de tiendas y puntos de venta.

En ese marco, la clientela parisina de Zara destaca por su carácter «multicultural», informa desde París Juan Pedro Quiñonero . Algunas grandes tiendas del grupo, en París, tienen una clientela esencialmente francesa. Otras, como las de los Campos Elíseos, o Saint-Germain-des-Pres, destacan por el triunfo «gallego» ante la clientela más cosmopolita.

En el corazón histórico, urbano y cultural de París, esas tiendas funcionan como triunfantes «laboratorios» de un gusto y una sensibilidad capaz de conquistar nuevos públicos y mercados de varios continentes y muy diversas raíces culturales.