Los chóferes de Montilla hicieron 1.441 horas extras durante la campaña de las autonómicas

Si se tiene en cuenta que las elecciones autonómicas en Cataluña se celebraron el 28 de noviembre, cabe deducir el motivo de esa hiperactividad mensual, desglosada en 776,72 horas extra diurnas, 381,54 horas nocturnas y 283,38 horas en festivos. La diferencia con el mes de septiembre, en el que sólo hubo 70,35 horas extras, es elocuente. También que este sobreesfuerzo laboral fue aumentado paulatinamente a medida que se acercaba la fecha electoral, pues en el mes de ocubre se alcanzaron ya las 668,77 horas extras, nueve veces la cifra registrada en septiembre y que coincide con el maratón inaugural protagonizado por los socios del tripartito, PSC, ERC e ICV.

También en respuesta a las preguntas parlamentarias presentadas por los populares, el ejecutivo actual explica que, en 2010, la plantilla de chóferes al servicio de la administración autonómica era de 128 puestos de trabajo, de los cuales 108 eran gestionados directamente por la subdirección general de Gestión de Servicios y Vehículos de Representación; 14 por el departamento de Política Territorial y Obras Públicas y 6, por entidades públicas. Actualmente, la flota de vehículos de representación de la Generalitat asciende a 75 vehículos (el tripartito llegó a tener 95). De éstos, hay 18 con categoría de coches de «alta representación», es decir, al servicio del presidente de la Generalitat y las doce consejerías.

Pese a la existencia de este parque móvil de vehículos —todos de la gama alta de Audi— y de la importante plantilla de conductores, el gobierno tripartito gastó en 2009 y 2010 un total de 1.066.149,23 euros en coches de alquiler con chófer para personal de la Generalitat. Recordar la fuerte polémica que provocó la decisión del ex presidente del Parlamento catalán, Ernest Benach (ERC), desvelada por ABC, de «tunear» su coche oficial con accesorios de lujo.

El citado departamento de Economía informa, asimismo, de que durante esos dos años, la Generalitat destinó 98.411,91 euros a servicios de taxi. Todo este dispendio se une a otros gastos supérfluos denunciados por el PPC, como «embajadas», subvenciones al pancatalanismo, informes técnicos de dudosa utilidad o personal, que han contribuido a disparar la deuda del gobierno autonómico.