Dennis Menchov, primer líder de la Vuelta a España

El ruso Denis Menchov, del equipo Rabobank, pidió paso entre los favoritos al ganar en Granada la primera etapa disputada en la modalidad de contrarreloj individual, de siete kilómetros de recorrido, lo que le permitió estrenar el maillot oro de la presente edición, mientras que Carlos Sastre (CSC), cuarto, fue el primer español.
Menchov, escalador de 27 años y residente en Pamplona, sorprendió a los especialistas y marcó un tiempo de 9.45 en el corto pero exigente recorrido granadino, que incluía una subida inicial de 2,8 kms que se le atragantó a más de uno. Aventajó en 1 segundo al belga Rik Verbrugghe (Quick Step) y en 3 al australiano Bradley McGee (Francaise), segundo y tercero respectivamente.
Carlos Sastre, cuarto a 7 segundos, Rubén Plaza (C. Valenciana), sexto a 13, y Roberto Heras (Liberty) y David Bernabeu, séptimo y octavo respectivamente a 15 segundos, fueron los españoles que entraron en el top ten de la etapa inaugural. El colombiano Santiago Botero (Phonak), noveno, cedió 18 segundos y el italiano Gilberto Simoni (Lampre) cumplió con la décima plaza. La etapa miró con lupa las actuaciones de Aitor González (Euskaltel) y Francisco Mancebo (Balears), ambos a 26 segundos del vencedor, de Iban Mayo que se dejó 38 segundos y Angel Casero (C.Valenciana) que se acercó al minuto (54 segundos).
El campeón de España de la modalidad, Iván Gutiérrez (Illes Balears) y Joseba Beloki (Liberty) se fueron al suelo. El primero de ellos perdió solo perdió 22 segundos a pasar del accidente que se produjo al encontrarse en su camino "un globo de la organización", pero al discípulo de Saiz le cayó 1.44 minutos. En la primera curva se encontró con el asfalto de cara y aún tuvo que agradecer que el susto no pasara de un fuerte golpe en el hombro izquierdo.
Su compañero, jefe de filas y defensor del título, Roberto Heras, repartió buenas sensaciones. Después del chasco en el Tour necesitaba una noticia agradable, y el tres veces ganador de la Vuelta dio el primer paso con un aire de firmeza y seguridad que le vendrá bien a su equipo. Lo que no fue una buena noticia para el Liberty fue la decepcionante actuación de Isidro Nozal, atrancado desde el principio y ya con un lastre de 1.23.
Menchov, un ciclista cuyo hábitat natural es la montaña, no entraba en las quinielas del prólogo y fue el único que desbancó al belga Verbrugghe, que durante mucho tiempo impuso la lógica de un especialista que tiene varios éxitos en prólogos cronometrados. Su victoria hace indicar que ha superado su frustración del Tour, donde no respondió con su nueva camiseta del Rabobank con los galones de líder.
Corredor de la factoría Banesto, el ruso de Orel tropezó con "una victoria inesperada". Aún reconociendo su mejoría en la modalidad desde que pasó a la escuadra holandesa, nunca pensó que podría estrenar a lo grande el maillot oro con la Alhambra como testigo.
Demostró ganas, ilusión y buena forma, ingredientes que pueden aportar confianza a uno de los talentos del pelotón que aún no han terminado de ofrecer lomejor de su repertorio.
Menchov logró la novena victoria desde que debutó en profesionales en 1999 y la segunda en la Vuelta a España después de la lograda la pasada temporada en Morella. En el Tour 2003 fue el mejor joven, dos años después de ganar el Tour del Porvenir. Sus victorias son de calidad y la mayoría en montaña.
Sabe lo que es ganar en Valdelinares, etapa inédita en esta Vuelta que probó en la Vuelta a Aragón, y se llevó la Vuelta al País Vasco, así como la golosa etapa del Mont Ventoux en la Dauphiné Liberé en 2002. Con estos datos sonó como sucesor de Armstrong en la Grande Boucle, pero las expectativas están por llegar.
De momento han mejorado sus prestaciones en contrarreloj, y aun no tiene ni de lejos el equipo del Tour, saldrá con la prenda dorada camino de Córdoba. Promete que se dejará ver en las etapas de montaña. Lo de ganar la Vuelta será otra historia. "Queda mucho para ganar y perder, pero todo se verá a partir de la segunda semana", dijo. Para empezar, un foráneo parece dispuesto a discutir a los españoles su Vuelta.
La segunda etapa, la primera en línea, un irá Granada y Córdoba con un recorrido breve de 189,3 kms. En el camino, una única dificultad, el Alto de San Jerónimo, de segunda categoría, a 12 kilómetros de meta, lo que podría aportar espectáculo en forma de ataques para evitar el esprint.
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