Don Joaquín celebra sus jornadas del pincho de lechazo a la brasa

Sobre una brasa ubicada en el exterior del restaurante, este asador de Pizarra —el primero en Málaga reconocido por la Asociación de Asadores de Lechazo de Castilla y León— ofrecerá durante una semana este bocado clásico castellano, elaborado con precisión milimétrica pese a los más de 600 kilómetros que separan el Valle del Guadalhorce de tierras vallisoletanas.

Una excusa perfecta para darle la bienvenida al buen tiempo desde sus terrazas cubiertas o al aire libre, acompañando el pincho con alguna de las más de 200 referencias de su bodega, o dejándose tentar por los platos fuera de carta, que cada día sorprenden con elaboraciones nuevas y de temporada.

Abierto en 2005 entre Pizarra y Álora, Don Joaquín se ha convertido en uno de los grandes templos del asado en la provincia, con Juan Gómez y Flores Postigo al frente. Su cocina bebe del recetario tradicional, mezclando platos malagueños con lo mejor de la gastronomía castellana, siempre bajo el sello inconfundible de la brasa de encina.

Además del lechazo, en Don Joaquín brillan los productos de temporada y de kilómetro cero, con una apuesta decidida por los sabores de la tierra y el producto de cercanía, convirtiendo cada visita en una experiencia para el recuerdo.