Opinión
Se fue Emerson, llegó el pacto y perdura Lopera
El paulista vino como melón por calar a Europa y hoy, tras ser macerado en verde, está en la mesa de la selección carioca como manjar de lujo
Esta funcionalidad es sólo para registrados
Iniciar sesiónSe fue Emerson Aparecido Leite do Souza Júnior, alias Emerson Royal . Lo hizo cantando el himno del Betis y dejando el testigo verdiblanco a su compañero de la izquierda progresista por la banda Juan Miranda González, fichado al ... Barcelona , destino del lateral derecho, en operaciones en teoría independientes. La del brasileño fue una interesante operación de perfil pandémico, pese a desarrollarse mucho que antes de que el coronavirus se pasease por Wuhan. Compra a medias, estancia un par de años del jugador en el Betis, pago al término de la cesión de la mitad desembolsada por los verdiblancos más una plusvalía y goce barcelonista del jugador, del que por Heliópolis se reservan un porcentaje en caso de traspaso .
Ingenierías financieras aparte, lo cierto es que el Betis le ha sacado un gran partido a la cesión . Algo que en el caso del paulista ha sido mutuo, pues vino como melón por calar a Europa y hoy, tras ser macerado en verde, está en la mesa de la selección carioca como manjar de lujo. Se va además convertido en bético de por vida, algo no tan extraño, pues raro es quien hace parada y fonda al final de la Palmera y no se lleva las trece barras tatuadas en el corazón.
La ida de Emerson y la llegada en propiedad de Miranda podrían haber monopolizado el interés de la semana en verdiblanco, pero, como resulta habitual, dos asuntos vinieron a escoltar a la temática deportiva : un lance judicial y un pacto accionarial.
A Lopera se le reprocha el tener al Betis en los juzgados, pero lo cierto es que alguna responsabilidad tendrán son los que firmaron en su día la asunción por el club de sus avales. Si los hubieran subrogado al peculio propio y no a la entidad, podrían haber condonado, aplazado o minorado ellos mismos el préstamo cuando les hubiera apetecido.
El pacto accionarial es una buena noticia , porque blinda al poder y a su entorno por ahora leal de cualquier tentación especulativa de alguno de sus integrantes en favor de la oposición. Un 4% de diferencia en acciones entre ambas partes no era para sentirse tranquilos. Lo deseable sería un acuerdo de mayor calado que abarcara más sensibilidades. Incluidas las de mírame y no me toques.
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete
Esta funcionalidad es sólo para registrados
Iniciar sesiónEsta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete