El derbi empieza en los Pirineos

Pues esta semana, al igual que ocurriera en la primera vuelta, el derbi comienza en los Pirineos, porque para ponerle las cosas más difíciles a sevillistas y béticos habrá jornada europea el jueves, apenas a setenta y dos horas antes de que converjan en Nervión ambos equipos. Dos partidos, contra Zenit en el Villamarín y el Dinamo en Zagreb, que se afrontan con ventaja en el marcador por parte de los profesionales, pero con distintas sensaciones por parte de los aficionados.

En el sevillismo se clama contra el arbitraje de los González en Cornellá, se lamenta las continuas lesiones de los jugadores, se empieza a cuestionar la labor de los preparadores físicos y la falta de respuesta del banquillo al flojo nivel en ataque. En el beticismo se alaba la capacidad de reacción del equipo, se festeja su juego aún cuando toma tonalidad gris, hay unanimidad sobre el trabajo de Pellegrini y confianza en que los suyos agoten las posibilidades en los tres torneos en que compiten.

Y aunque en la mente de todos estará durante la semana el partido del domingo en el Sánchez-Pizjuán , primero toca asegurar el pase a los octavos de la Liga Europea. Lopetegui y Pellegrini tendrán que hilar finos para confeccionar alineaciones fiables y, al mismo tiempo, dar descanso a los imprescindibles con vistas a tres días después. Al Zenit, por calidad, y al Dínamo, por jugar a favor de público, no conviene minusvalorarlos. Los partidos frente al Mallorca y al Español deben servir de ejemplo.